"La boda la organizamos nosotros, sin contratar wedding planner. La verdad es que lo más difícil para nosotros fue tomar la decisión de reducir los invitados; los cambios de restricciones y aforos eran constantes y no sabíamos cómo iban a estar para nuestra fecha. Así que decidimos finalmente reducir de 170 invitados aproximadamente a 29, familiares más cercanos y varios amigos que representaran a los que no asistieron. También fue complicada la distribución de las mesas, pues no pudimos hacerlo hasta días antes de la boda. Dos semanas antes, las mesas debían ser de 4 comensales, y unos días antes de la boda, lo cambiaron a 6".
- De Grace Kelly a Carolina, inspírate en los vestidos eternos de las novias de Mónaco