Mirar al plato mientras estás sentada a la mesa es el segundo, por lo que dejar a un lado el móvil y apagar la televisión para disfrutarlo como te mereces es fundamental. Por último, escucha a tu cuerpo y pregúntate si de verdad tienes hambre cuando vas a picotear. Muchas veces esa sensación de vacío en el estómago es en realidad sed.