RELOJ DE SOL DE CELA
Si después de leer los poemas y asomarse a los miradores, se sigue caminando diez minutos por la carretera de la República, se descubre el Reloj de Sol de Cela, dedicado al escritor que, a su vez, había dedicado a esta sierra su Cuaderno del Guadarrama (1952). Al lado está Navarrulaque, pradera bonita donde las haya, con una fuente-refugio que aúna las dos únicas caridades saludables que a un caminante pueden hacérsele: abrigo y agua. Un mojón de granito recuerda que esto es Parque Nacional de la Sierra del Guadarrama. A partir de aquí, lo más fácil es seguir subiendo por la carretera de la República hasta el puerto de la Fuenfría y después bajar por la calzada romana (círculos verdes), completando una ruta circular de unas 4 horas.
Seis escapadas cerca de Madrid, una por cada autovía desde el km 0
OTRAS RUTAS POR EL VALLE
Con los planos e indicaciones que dan en el centro de educación ambiental, se pueden explorar nuevas sendas, como la Calle Alta –marcada con círculos rojos–, que discurre por la ladera contraria del valle, o la del Pico Majalasna –círculos amarillos–, que también pasa por los miradores. Con niños, hay también caminos cortos y con muy poco desnivel, como el del Agua o el de los Campamentos. Y si no se quiere andar, en las praderas de las Dehesas hay mesas y fuentes para comer: la de Majavilán, la de la Teja...