TITISEE
A unos 30 kilómetros de Friburgo, el pequeño y turístico pueblo de Titisee da nombre al lago natural más grande de la Selva Negra, con dos kilómetros de largo y 800 metros de ancho. Algunos se animan y caminan por el sendero que rodea todo su perímetro, otros lo admiran apostados en su puertito, pero ninguna experiencia mejor que subirse a uno de los barcos que navegan por sus aguas admirando el entorno y el Feldberg, la cumbre de este boscoso y esquinado territorio alemán. También se puede pescar en él, recorrer en piragua y, en invierno, andar sobre sus aguas congeladas. Nada más bajar, en el taller de la familia Drubba (drubba.com) podemos ver el trabajo de los artesanos locales, que fabrican los famosos relojes de cuco.
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