Sol, playa y lava… en Tenerife

Subir al imponente Teide, desafiar al vértigo en el acantilado de los Gigantes, perderte por los bosques de laurisilva y pasear por la playa de las Teresitas…. Te proponemos un recorrido virtual por esta gran isla canaria con cientos de tentaciones para disfrutar con la vista y, después, por qué no, planear unas vacaciones.

by hola.com
Alrededor del Teide se extiende la diversidad paisajística de esta tierra de carnaval, naturaleza y peculiar historia. Hay playas volcánicas y otras de arena fina, aguas donde se pueden contemplar especies como la tortuga boba y la ballena piloto y temibles acantilados, paisajes de lava que contrastan con valles de cultivos tropicales, bosques de laurisilva y campos de golf. Y, claro, también pueblos de pasado colonial y ciudades monumentales, como San Cristóbal de La Laguna, Patrimonio de la Humanidad, o Santa Cruz de Tenerife, epicentro de su archifamoso Carnaval. Si a este cóctel le añadimos el toque de una sabrosa gastronomía, con las papas arrugadas con mojo picón como plato insignia, y un clima primaveral, el resultado es digno de saborear, ¿a qué te gustaría probarlo?
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Playa del municipio canario de Arona, en el sur de la isla de Tenerife / © Turismo de Tenerife. 
Hay nueve campos para disfrutar del mejor golf en Tenerife. ¿Eres de los que patea mejor con vistas espectaculares del Teide o prefieres jugar con el rumor de las olas acompañándote en el recorrido? En la imagen, campo de golf de Arona / © Turismo de Tenerife. 
La Caleta, en Adeje, es una preciosa playa de aguas cristalinas y fuerte oleaje / © Turismo de Tenerife. 
Drago milenario de Icod de los Vinos, una especie vegetal típica del bosque seco mediterráneo considerada el símbolo natural de la isla de Tenerife, conjuntamente con el pinzón azul / © Turismo de Tenerife. 
La isla ofrece muchas tentaciones, desde descubrir sus valioso fondos marinos practicando el submarinismo o saborear las papás arrugadas con mojo picón, el plato más tradicional de la gastronomía canaria / © Turismo de Tenerife. 
En las desembocaduras de los barrancos que cortan el acantilado de los Gigantes, un precipicio abrupto, angosto y descomunal de 450 metros de altitud, hay pequeñas playas y ensenadas donde recalan los barcos turísticos que avistan delfines y ofrecen las mejores vistas / © Turismo de Tenerife. 
Pese a su apariencia semirural, Las Teresitas es oficialmente la playa de la capital chicharrera, creada con arena traída del Sáhara. Las palmeras contribuyen a esa sensación de irrealidad en una zona de contadas caletas, todas de arena negra, debido a la geografía volcánica de Tenerife / © Turismo de Tenerife. 
Poder contemplar los bailes y saltos de los delfines, las orcas y los leones marinos en el Delfinario es una de las grandes atracciones del Loro Parque, en el Puerto de la Cruz / © Turismo de Tenerife. 
Los Realejos es una de las zonas mejor conservadas de las islas, ideal para actividades en contacto con la naturaleza, especialmente la de caminar por su extensa red de senderos / © Turismo de Tenerife. 
Playa El Médano, en Granadilla de Abona, con una preciosa arena fina dorada, aguas muy tranquilas, transparentes y de poca profundidad, lo que la hacen perfecta para ir en familia / © Turismo de Tenerife. 
Valle de la Orotava, de extraordinaria riqueza natural, con un vigilante Teide al fondo / © Turismo de Tenerife. 
Arquitectura tradicional en el Puerto de la Cruz, uno de los enclaves más turísticos de la isla / © Turismo de Tenerife. 
San Cristóbal de La Laguna, conocida popularmente como La Laguna, es el primer ejemplo de ciudad colonial no fortificada y precedente de las fundaciones americanas. Sus notables muestras de arquitectura tradicional y su condición de ciudad universitaria marcan su vida actual / © Turismo de Tenerife. 
Dicen los que han subido hasta la boca del poderoso, evocador, desolador y majestuoso volcán del Teide, a casi 4.000 metros de altura, que esta experiencia es como rozar el cielo / © Turismo de Tenerife.