El Príncipe George y la montaña rusa de emociones que vivió en la coronación de su abuelo

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Príncipe George

Su nueva posición en la línea de sucesión

Con sólo 9 años de edad, el Príncipe George dio un importante paso en su nueva posición como segundo en la línea de sucesión a la corona, al formar parte del séquito real que acompañó a su abuelo en su coronación. Consciente de sus futuras responsabilidades en la familia, el Príncipe se tomó muy enserio su papel al encabezar el séquito de pajes que asistieron al Rey Carlos III durante toda la ceremonia de coronación en la que, los ocho niños elegidos, jugaron un papel fundamental durante el solemne e histórico acontecimiento.

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Los nervios previos a la coronación

Mientras su familia fue testigo de la ceremonia desde las primeras filas, el Príncipe George participó activamente durante la coronación de su abuelo. De acuerdo con el Royal Collection Trust, ser paje es un honor que tiene una duración de dos o tres años, lo que significa que es posible que estemos viendo a este mismo grupo de niños acompañando al Rey en futuras ocasiones. Ante la importancia de este evento y su papel en él, de inicio, el Príncipe George se dejó ver nervioso y pensativo.

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El paje más joven

Además de ser el primer miembro de la familia real en participar como paje en una coronación, el Príncipe George se convirtió en el más joven del séquito. El honor de ser paje real suele ser otorgado a los hijos adolescentes de los nobles y de la alta burguesía, sobre todo a los miembros de alto rango de la Casa Real.

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El honor de ser paje real

Desde hace meses se sabía que el Príncipe George tendría una participación muy significativa en la ceremonia de coronación de su abuelo. Recientemente, un portavoz del Palacio de Kensington, residencia oficial de la familia Gales, compartió la reacción del Príncipe William ante el honor que recibiría su hijo: “Todos estamos entusiasmados, será un momento increíble y especial”. Aunque esta es la primera ocasión que el Príncipe George participa activamente en una ceremonia real, no es la primera vez que es paje, su debut en este papel ocurrió en la boda de su tía Pippa.

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Atento a las indicaciones

A su llegada a la Abadía, el Príncipe George escuchó atento las indicaciones para cumplir con la importante tarea de asistir al Rey durante su coronación. Al inicio, lo vimos mantener su personalidad tímida con la que suele aparecer en los eventos públicos, pero sobre todo, una seriedad y formalidad que dejan ver que entendía la importancia de este suceso.

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El paje de su abuelo

Al encabezar el séquito real del Monarca, el Príncipe George estuvo cerca de su abuelo durante la ceremonia de coronación. Si bien participaron ocho pajes en la ceremonia, George formó parte del grupo de cuatro al servicio del Rey, mientras que los otros cuatro acompañaron a la Reina Camilla.

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Sus labores como paje de honor

Ver al Príncipe George desempeñar las tareas propias de un paje real hizo de esta ceremonia algo mucho más especial. Durante la coronación lo vimos en varias ocasiones levantar con mucho cuidado la capa real que usó el Rey Carlos III para el momento del juramento, la unción y la investidura.

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El primer heredero siendo paje real

El gran desempeño que el Príncipe George realizó en su papel como paje real del Rey Carlo III es un claro signo de la madurez y compromiso con el que asume su lugar en la familia. La participación del Príncipe en la ceremonia rompe con la tradición real, de más de un siglo, en la que los herederos eran espectadores durante la coronación de los reyes, pues es el primero en su familia en desempeñar esta significativa función.

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El uniforme de George

Como el resto de los pajes, el Príncipe George llevó el uniforme que se usó, por primera ocasión, durante la coronación de Eduardo VII, en 1902. Dicho traje está compuesto por una túnica escarlata decorada con encajes dorados y puños de terciopelo azul, con un diseño de frente abierto y forrado con seda. También lleva un chaleco de rosa, en seda marfil, adornado con galones dorados, pantalones de lana y botas. Estos atuendos fueron confeccionados por Ede & Ravenscroft durante el reinado de la Reina Isabel II; sin embargo, fueron adaptados para esta ocasión.

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El más cómodo en el balcón

Una vez terminada la ceremonia protocolaria, el Príncipe George sorprendió al dejarse ver alegre y mostrando sus rasgos en el balcón, una actitud que no le veíamos desde que era mucho más pequeño y solía jugar en ese sitio en los actos públicos familiares. Compartió el honor de ser paje con Lord Oliver Cholmondeley, Nicholas Barclay y Ralph Tollemache, los otros tres nobles elegidos para servir al Rey; mientras que, del lado de la Reina Camilla, fueron sus nietos: Gus y Louis Lopes, así como Freddy Parker Bowles, junto a su sobrino nieto, Arthur Elliot, quienes la acompañaron.

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Un líder en el balcón

A pesar de que el Príncipe George suele ser el más tímido de sus tres hermanos, parece que la experiencia que tiene en el balcón del Palacio de Bukingham le dio la confianza para ser él que guiara al resto de los niños, quienes sorprendidos veían el despliegue militar ante la mirada curiosa de una multitud, que llevaba días reservando su lugar para ver el nuevo monarca saludar por primera vez desde este icónico lugar en el que se ha hecho historia. Lejos de sus papás y hermanos, que estaban separados de él por uno de los pajes, George se veía completamente cómodo con su papel ante la mirada del público, dejando ver lo mucho que ha crecido en los últimos meses. Ha de recordarse que fue el año pasado, en el Jubileo de Platino de la Reina Isabel, cuando apareció por última ocasión en este escenario acompañado de su bisabuela.

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Una imagen dice más que mil palabras

Esta imagen junto a su abuelo, el Rey Carlos III, tiene una importante carga de nostalgia a sabiendas de que George vivirá su propia coronación en algunos años, razón por la que esta foto, en la que aparece el Monarca saludando a su pueblo, es muy especial, al ver como el niño observa orgulloso al Soberano desempeñar el papel que, en algún momento, le tocará a él.