Al parecer, la decisión de sus padres ante su nacimiento fue la correcta, pues tanto Louise como James mantienen un perfil muy discreto, alejados casi al máximo de la vida pública, a pesar del papel cada vez más protagonista de sus padres. Cuando en el 2020, Sophie explicaba esta decisión a The Times, decía: “Tratamos de criarlos con el entendimiento de que muy probablemente van a tener que trabajar para ganarse la vida. Por eso tomamos la decisión de no usar los títulos de Su Alteza Real. Los tienen y pueden decidir usarlos a los 18 (años), pero es muy poco probable”.