Mismo día, dos looks muy diferentes, Kate y Meghan dejan claro que el marino es el tono de la temporada

Tal como se había anunciado, los Duques de Sussex asistieron al primer de los actos conmemorativos por Día del Recuerdo, fecha en la que se homenajea a los caídos en la Primera Guerra Mundial. Para esta solemne cita, llevabada a cabo en el emblemático Field of Remembrance en la Abadía de Westminster, Meghan lució un look sobrio y discreto, perfecto para un evento de esta naturaleza. 

Sin duda, el protagonista del look de Meghan para este día fue su abrigo azul marino de tela afelpada. Se trata de un diseño largo de silueta envolvente, con solapas y bolsas grandes. Esta prenda dejó entrever una falda negra de textura vaporosa de un largo similar, la cual bien podría ser parte de un vestido. La botas fueron otro de los elementos que indiscutiblemente atrajeron las miradas. Se trata de un modelo de Victoria Beckham caracterizado por su tubo alto y tacón ancho, las cuales se le vieron por primera vez en la misa de Navidad del año pasado.

La Duquesa de Sussex quiso acentuar su silueta con un cinturón negro delgado con hebilla dorada. Siguiendo la tendencia monocolor en su look, llevó unos guantes de cuero también en marino.

Como dicta el protocolo para los actos religiosos, Meghan llevó tocado, que en este caso era de tipo casquete, diseñado en terciopelo y con un velo de red. La Duquesa usó esta pieza, de Philip Treacy, con la melena suelta, peinada en ondas muy suaves. En lo que respecta a su maquillaje, fue fiel a su estilo y lució de lo más natural.

Después de su visita a Pakistán, en la que dio cátedra de estilo al lucir atuendos impecables, Kate ha vuelto a aparecer en público y ha impactado con su look. Para asistir al lanzamiento de la organización benéfica National Emergencies Trust, la Duquesa de Cambridge ha usado un vestido de un modelo conocido, pero de un tono diferente y totalmente favorecedor. Se trata del modelo Kate de la firma Emilia Wickstead. Este diseño se caracteriza por su cuello redondo, manga larga, falda trapecio hasta la rodilla y el infaltable cinturón del mismo color para acentuar al silueta. La esposa del Príncipe William posee esta prenda en verde y malva y ha triunfando en más de una ocasión al usarlos.

Kate combinó su vestido con unos tacones en punta de color negro y acabado acharolado, el modelo Rommy 85 de la famosa firma Jimmy Choo. Estos zapatos son unos de los favoritos de la Duquesa, pues ya se los hemos antes pero con acabado de brillantina en plata.

Kate complementó su look con un discreto y elegante bolso clutch de piel de cocodrilo también en color negro, éste de Aspinal x Beulah. En esta ocasión no podía faltar su inseparable anillo de compromiso, el cual casualmente combinó a la perfección con el color de su vestido. Un accesorio que no muchos vieron fue el broche con forma de amapola que la Duquesa llevó en el pecho a propósito del Día del Recuerdo.

También en sincronía perfecta con su vestido y su anillo fueron los pendientes de diamantes y zafiros que también pertenecieron a su fallecida suegra Diana de Gales. Si bien Kate llevó su melena suelta, estas joyas pudieron apreciarse gracias al viento que por momentos las dejó al descubierto. En lo que respecta al maquillaje, se apegó a su estilo natural.