Kate combinando en azul con William para su cita de novios en Wimbledon

A lo largo de los años, en más de una ocasión se ha visto al Príncipe William y a la Duquesa de Cambridge -Kate Middleton- disfrutar desde el palco real algún partido del torneo de Wimbledon. El amor de la Duquesa por el deporte blanco es bien conocido y ahora en su papel de patrona de este deporte en Reino Unido, se ha permitido vivir al máximo la emoción desde las gradas; por su parte, el Príncipe William pareciera pasarla de lo mejor al ver a su mujer reaccionar ante las jugadas, por lo que no es raro que dejen de lado el protocolo y se conviertan en unos aficionados más del famoso torneo. Así lo han hecho esta mañana cuando han dejado a los tres pequeños en casa para vivir una salida de novios, en la que se la han pasado fenomenal.

Como es costumbre, Kate ha dejado maravillados a los amantes de la moda y es que en esta edición de Wimbledon en la que ha tenido tres apariciones, simplemente no ha habido fallo. Primero luciendo el tradicional blanco del torneo, ayer, desempolvando de su clóset el favorecedor vestido verde botella de Dolce & Gabbana que estrenara en Canadá y esta mañana apareciendo en un diseño que no se le había visto antes en azul cielo con una silueta inspirada en los años 50s. Este mismo color fue elegido por el Príncipe William en camisa y corbata, haciendo una combinación perfecta.

Para esta ocasión, la Duquesa confió en una de las diseñadoras favoritas de las royals y que varias de las presentes llevaban esta tarde londinense en el palco real, Emilia Wickstead. Se trata del modelo Jordin en tela texturizada y que tiene un precio de 1,390 libras esterlinas (alrededor de $36,835 pesos mexicanos), aunque ha de decirse que se agotó de tiendas en cuestión de minutos. Aunque la pieza está hecha en tela muy delicada, Kate no dudó ni un momento para ponerse el moño morado que se le ha visto en varias ocasiones estas semanas y que indica su papel como patrona en la organización del tenis británico, papel que le fue otorgado con mucho cariño por la Reina Isabel.

Kate combinó su vestido con accesorios en beige, apostando por la moda fast fashion, Kate llevó los zapatos modelo Nicholes de Aldo que tienen un precio de 80 dólares (alrededor de $1,600 pesos mexicanos). El bolso le dio un toque fresco al look con un brocado rococó que los seguidores de su estilo han determinado como una pieza vintage. Su infaltable reloj Ballon Bleu de Cartier en este evento iban a juego con los aretes suecos de In2Design de 152 dólares (algo así como $3,040 pesos mexicanos) y sus fieles lentes Ray Ban, esta vez los Wayfarer II 55mm de 153 dólares (aproximadamente $3,060 pesos mexicanos).

En la cancha, Roger Federer -el tenista favorito de los Middleton y quien incluso ha dado ya una clase del deporte al Príncipe George- enfrentaba a Novak Djokovic, en la final masculina del torneo que ha levantado muchas emociones en las últimas dos semanas. Desde las gradas, Kate no pudo evitar vivir al máximo cada una de las jugadas, ante la mirada divertida de William, quien en más de una ocasión le arrancó una carcajada a la madre de sus hijos. Más enamorados y cómplices que nunca, los Duques disfrutaron de esta salida casual mientras que George, Charlotte y Louis se quedaron en casa.

Aunque los Duques suelen ser muy discretos cuando de muestras de afecto se trata, se sabe que en los eventos deportivos hacen una que otra excepción como en esta ocasión que se les vio especialmente cercanos. ¿Qué se dirán?

Pero el que no estuvieran ahí no significó que Louis no tuviera una sorpresa esperando para él. Stan Smith entregó a Kate uno de sus famosos tenis con su nombre en versión muy pequeñita y autografiada para el travieso Principito.

A unas cuantas gradas de los enamorados, la familia de Kate tampoco se quiso perder ni un momento de este importante partido para su amigo Federer. Carole Middleton, quien heredó el amor por el tenis a sus hijos, estuvo acompañada de Pippa y James, así como la novia de éste, la joven francesa, Alizee Thevenet.

Una vez más, Pippa ha partido plaza y después de que ayer se le viera con las Duquesas de Cambridge y Sussex luciendo uno de sus vestidos más estilosos hasta el momento, esta vez no ha decepcionado. Esta ocasión eligió un vestido rosa con estampado muy al estilo del cherry blossom de By Timo que tiene un precio en rebaja de 1,979 coronas suecas (casi $4,000 pesos mexicanos) combinado con unos zapatos de lo más chic en crudo y clutch a juego.