Tras la muerte de Isabel II, la Familia Real ha vivido cambios. Con Carlos III en el trono, los príncipales apoyos son Camilla, que ya ejerce de reina consorte, y los príncipes de Gales. En un segundo plano ha quedado la condesa de Wessex, cuyo papel está por determinar, mientras que han dejado claro que la presencia de los duques de Sussex es una cuestión puntual en lo que dura el duelo por Isabel II