Para finalizar su jornada, el príncipe Guillermo y Kate Middleton se dirigieron a HugglePets in the Community, una fundación sin ánimo de lucro que se apoya en la terapia asistida por animales para ayudar a los niños y jóvenes con necesidades especiales. La pareja se unió a una sesión en grupo con alguno de ellos antes de visitar la sala donde pudieron observar y sostener a alguno de los animales con los que trabaja la organización. Entre ellos, Gus, un conejillo de indias que llamó la atención del Duque. Sosteniéndolo entre sus manos, quizo preguntarle a algunos de los niños allí presentes sobre sus mascotas. Kate, por su parte, se atrevió a coger a Bárbara, un dragón barbudo de color amarillento que parecía estar realmente confortable sobre sus manos.