Hace dos semanas la vimos echarse unos divertidos bailes con el oso Paddington y ahora da una nueva muestra de su mejoría. Tras las primeras molestias de su tercer embarazo, que la llevó a permanecer en reposo seis semanas, la Duquesa de Cambridge se enfunda su chándal y se va jugar al tenis con los más pequeños. ¡Choca esos cinco!
Viendo estas imágenes parece que los días en los que la mujer de Guillermo ha estado apartada de la actividad oficial debido a la hiperémesis gravídica que padece -y que también le afectó durante sus otros dos embarazos- han quedado atrás. En su rol de patrona de la Asociación Nacional de Tenis de Gran Bretaña, Kate ha participado en un programa para enseñar a niños de entre cinco y ocho años a disfrutar de este deporte, un patrocinio que asumió el año pasado de manos de la Reina y del que este año se han beneficiado 22.500 niños. La Duquesa no solo conoció a algunos de los talentos más prometedores de la raqueta, también se animó a participar en el entrenamiento.
La Duquesa de Cambridge aparece por sorpresa y bailando
Primera aparición de la Duquesa de Cambridge tras anunciar su embarazo
La Duquesa de Cambridge, la gran ausente en el primer día de colegio del príncipe George
La Duquesa se equipó para la ocasión con un chándal negro, el pero recogido con una coleta y unas deportivas blancas; eso sí, no se quitó ni el zafiro de compromiso ni la amapola roja que recuerda a los caídos de la Primera Guerra Mundial y que tradicionalmente se lleva en la solapa desde finales de octubre hasta el 11 de noviembre, cuando tiene lugar el Día del Recuerdo o Día de la Amapola en el Reino Unido y en los países de la Commonwealth.
Kate también pudo conocer en este encuentro a algunos de los aprendices de un programa diseñado por la fundación que lidera junto a los príncipes Guillermo y Harry con el objetivo de apoyar a jóvenes con oportunidades limitadas a convertirse en entrenadores deportivos y, según ha publicado la edición digital de HELLO! también habló con algunos de los mejores entrenadores del país -entre ellos Judy Murray, la madre de Andy Murray- para ver cómo puede animar a George a practicar este deporte.
Esta aparición es una muestra más de que cada día se encuentra mejor de las náuseas severas que sufre cada mañana, e incluso le llevaron a perderse el primer día de colegio del príncipe George, es que el Palacio de Kensington anota nuevas fechas en su agenda. La Duquesa acudirá la próxima semana a una cena de gala en The Orangery como patrocinadora del Centro Nacional de Niños y Familias Anna Freud.
