Nuevo peinado, envidiable figura, vestido a la última de Ralph Lauren, rutilante sonrisa, mirada chispeante… La Duquesa de Cambridge no ha dejado lugar a dudas hoy de que estaba más que lista para volver al trabajo después de su breve baja por maternidad. La esposa del príncipe Guillermo, que hacía su primera aparición pública en solitario desde el nacimiento de la princesa Charlotte, no podía disimular ni sus ganas de regresar ni su nueva felicidad a su llegada al Centro Anna Freud para la promoción de la salud mental infantil, una causa que le toca muy hondo.
Saludó a su presidente Michael Samuel con un cariñoso beso, ya que se trata del esposo de Julia Samuel, la amiga de la princesa Diana y la madrina del príncipe Guillermo. El centro lleva el nombre de la hija de Sigmund Freud , que era también psicóloga y especialista en la salud mental de los niños. En 1952 fundó la Clínica de Hampstead, el primer centro psicoanalítica infantil para la investigación observacional, la enseñanza y el aprendizaje y fue rebautizado en su honor cuando ella murió.
Trascendía en cada detalle la importancia de este compromiso para la duquesa Catherine. Quiso dar una nueva visión de la cuestión y contribuyendo a su objetivo se presentó también con imagen renovada. Estrenó un vestido camisero de pata de gallo, ceñido a la cintura con un fino cinturón, de la firma americana Ralph Lauren, cuyo precio asciende a alrededor de los 1.700 euros; y mostró al mundo su nuevo peinado con flequillo, creado para ella por su peluquero de confianza, Richard Ward.
La Duquesa, de soltera Kate Middleton, ha mantenido un perfil bajo desde que diera a luz el 2 de mayo. Durante todo este tiempo la feliz mamá ha estado retirada del mundanal ruido e instalada junto a su ampliada familia en la residencia de campo de Anmer Hall, mientras se adaptaba a los cambios que conllevan una segunda maternidad y el ajetreado cuidado de sus dos pequeños, los príncipes George y Charlotte.
Sus apariciones públicas se han contado con los dedos de una mano: los actos del Trooping the Colour 2015, el campeonato de Wimbledon o la Copa Mundial de América en Portsmouth, donde la duquesa Catherine apareció muy sonriente y de buen humor a pesar de que el evento se canceló por la lluvia. Después, los Cambridge viajaron a Balmoral para arropar a la reina Isabel en la celebración de un nuevo logro: haberse convertido en la soberana con el reinado más largo de Gran Bretaña.
El compromiso de hoy -el primero en solitario de su vuelta a la vida oficial- era muy significativo, porque la Duquesa siempre se ha entregado con afán a la cuestión de la protección de la salud mental en los jóvenes desde que se embarcase en su oficio real. Así la duquesa Catherine manifestó en marzo su apoyo a la campaña Time to Mind, un proyecto creado por The Times que pide una mayor inversión en los servicios de salud mental infantil. A principios de este año, la Duquesa también respaldó la Semana de la Salud Mental de los Niños con la grabación de un vídeo para Place2Be, la fundación de la que ejerce el patronazgo desde 2013.
Se cree que la reina Isabel ha dado a la esposa de su nieto un honor especial en reconocimiento a toda su contribución a la Familia Real británica hasta el momento y que ha sido galardonada con la orden de la Familia Real de la reina Isabel II, un regalo personal de la soberana.
