Su agenda oficial se suspendió hace ya un par de semanas debido a la pandemia del COVID-19, pero eso no quiere decir que los reyes Felipe y Letizia no continúen trabajando desde el Palacio de la Zarzuela. Allí hemos podido ver, a lo largo de estos días, al monarca reunirse tanto físicamente como mediante videoconferencia con diferentes agentes sociales y políticos, que le han informado de la situación de la crisis actual. Pero hasta el momento no habíamos visto a doña Letizia realizando este trabajo de despacho junto a su marido. Hasta este mismo jueves.
Horas después de que don Felipe se trasladara hasta el hospital de campaña que se ha instalado en el recinto ferial de Ifema, donde permanecen ingresados los pacientes más leves afectados por el coronavirus, para conocer de primera mano el trabajo que se está llevando a cabo en el complejo, los reyes contactaban por videoconferencia con el presidente de Mercadona, Juan Roig. Acompañado por parte de su equipo directivo, el empresario trasladaba al matrimonio su orgullo por el trabajo y el esfuerzo de los 90.000 trabajadores de la compañía del sector de la distribución alimentaria.
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Roig ha destacado el valor de la compañía, en la que diariamente trabajan 2,5 millones de personas, entre agricultores, ganaderos, transportistas e industria, para abastecer a los comercios con todos los productos necesarios. Además, ha aprovechado para subrayar que es muy importante "que la economía no pare, pero siempre garantizando la seguridad y la salud" de todos los empleados. El presidente de Mercadona ha insistido en que la sociedad española tiene la obligación de crear las condiciones económicas y sociales necesarias para que el país despegue lo más rápido posible, una vez que concluya la situación excepcional derivada del COVID-19.
Aunque hasta este jueves no la habíamos visto reunida en el despacho del Palacio de la Zarzuela, lo cierto es que doña Letizia ha estado en permanente contacto con diferentes agentes sociales y políticos, al igual que su marido. Así, el miércoles mantuvo conversaciones con varias organizaciones de salud pública. Por la mañana habló con el presidente de la Confederación de Salud Mental España, Nel González Zapico, que trasladó a la Reina su preocupación por los efectos de esta crisis sanitaria como retroceso sobre la salud mental y la atención de los enfermos. También pudo dialogar con Ignacio Bayón, presidente de la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción (FAD), con el que comentó las nuevas iniciativas ante el gran impacto social post crisis en las relaciones generacionales y la acción prioritaria por combatir noticias falsas.
Un día antes, los Reyes conversaron con el presidente de Cruz Roja Española, Javier Senent, y de la ONCE, Miguel Carballeda, para conocer la labor de estas organizaciones en la lucha contra el coronavirus. El lunes, don Felipe y doña Letizia ya se habían puesto en contacto con los sanitarios para agradecerles su esfuerzo y su labor. En concreto, hablaron con los gerentes del Hospital Universitario La Paz -el centro médico de la Comunidad de Madrid con más afectados-, del Hospital Universitario Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares y del Hospital San Pedro de Logroño, en La Rioja.
Con todo, hay que remontarse hasta el viernes 6 de marzo para ver las últimas imágenes de doña Letizia en un acto público. Fue precisamente junto a la ministra de Igualdad, Irene Montero, quien días después daría positivo en las pruebas del COVID-19. Por precaución, los Reyes se sometieron al mismo test, tal y como informó la Casa Real española. Los resultados resultaron negativos en este caso, aunque, según se pudo apreciar después, "siguiendo las recomendaciones de las autoridades sanitarias Su Majestad la Reina permanecerá sin actividades y se hará los controles periódicos de toma de temperatura requeridos en estas situaciones".
