Los Premios Príncipe de Asturias ponen cada año al Principado en la escena internacional y la elección del pueblo ejemplar es una enorme de ventana que permite impulsar a pequeños municipios en plena vorágine de despoblación del mundo rural. Por eso, los 98 vecinos de la localidad de Asiego, en Cabrales, esperan como agua de mayo la visita de los reyes, que este año irán por primera vez acompañados de sus hijas la princesa Leonor, y la infanta Sofía. La heredera debutará en la ceremonia de entrega de los galardones que llevan su nombre desde 2014 con la misma edad que tenía su padre cuando hizo lo propio. Al día siguiente de la gran gala en el Teatro Campoamor, la familia recorrerá los montañosos paisajes de este pueblo situado en plenos Picos de Europa seleccionado como Pueblo Ejemplar 2019.
Situado a 425 metros de altura, Asiego es un balcón de excepción para admirar el Naranjo de Bulnes y uno de los pocos reductos de la auténtica arquitectura tradicional asturiana, pero, víctima del éxodo hacia las ciudades, en el pueblo solo quedan 98 habitantes, de los que ocho son menores, todo un récord teniendo en cuenta que el municipio pasó 18 años sin ver un nacimiento. Muchos de ellos son de la edad de Leonor y Sofía, tal y como informa el diario El Comercio, por lo que la expectación por conocerlas es cada vez mayor y los niños esperan su visita con muchísima ilusión.
Cuando la Fundación Princesa de Asturias anunció que esta localidad del concejo de Cabrales había sido seleccionada entre las 26 candidaturas presentadas, el cielo se lleno de voladores para celebrar la noticia. "Siempre te presentas para ganar pero éramos conscientes de que iba a ser complicado, pues había mucho nivel", contaba al mismo diario asturiano Javier Niembro, portavoz de los vecinos. Por su parte, el alcalde, José Sánchez, solo espera que la visita de los Reyes y sus hijas coindida con un día de sol que permita contemplar el impresionante paisaje que rodea este enclave que aspirar a "resucitar" gracias al regreso de algunos jóvenes y al reclamo turístico. Con una población dedicada en su mayoría a la ganadería, Asiego es uno de los principales centros de producción del famoso queso cabrales y elabora su propia sidra, manjar que aún no podrán probar Leonor y Sofía, pero que seguro sabrá apreciar su valor gastronómico y cultural.
Asiego tomará así el relevo a Moal, situado en el concejo de Cangas de Narcea, y que el año pasado se vistió de gala para recibir a los Reyes, que no dudaron en empaparse de las tradiciones de la zona y saludar a la marea de vecinos que salió a la calle para verles de cerca. El premio al pueblo ejemplar se convocó por vez primera en 1990, al cumplirse el décimo aniversario de la Fundación, y tiene una naturaleza y carácter diferentes a los Premios Princesa de Asturias. Su dotación económica es de 25.000 euros.
La princesa Leonor culminará con su debut en los Premios el próximo 18 de octubre su creciente protagonismo en la vida institucional. Un camino que inició en 2018 con la entrega del Toisón de Oro por parte de su padre don Felipe, la lectura del artículo 1 de la Constitución en los actos conmemorativos de su 40 aniversario y su primer acto oficial en el primer centenario de la coronación de la Virgen de Covadonga, del Parque Nacional de la Montaña de Covadonga y al decimotercero de los orígenes del Reino de Asturias.
La alegría de los Reyes al saber que su hija irá a los Premios Princesa de Asturias
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