La primogénita de los reyes Felipe y Matilde de los belgas nació el 25 de octubre de 2001 en el Hospital Erasmus de Anderlecht, ubicado en Bruselas donde también lo hicieran posteriormente sus hermanos pequeños, y fue bautizada con los nombres de Elisabeth Thérèse Marie Hélène. Desde el momento de su nacimiento, la pequeña se convertía en futura heredera a la Corona belga. Con tan solo cinco años hizo frente a su primer baño de masas en la denominada 'Semana de la lectura de Bélgica' dejando a todos boquiabiertos por la profesionalidad y la soltura con las que la niña cumplía con las obligaciones de lo que se podría llamar su primer acto oficial.

La pequeña Princesa, que lleva el nombre de su tatarabuela la Reina Elisabeth y de su antepasada la Emperatriz Sissi, rápido de convirtió en el centro de todas las miradas y en la niña de los ojos de su tía abuela, Paola de Bélgica. En la imagen, la reina Paola mira a Elisabeth, de dos años, en brazos de su padre mientras que Matilde observa la escena. 

A Elisabeth no le duró mucho el reinado de su "palacio" y en agosto de 2003 tuvo que compartir su protagonismo con su hermano, el príncipe Gabriel, por el que siente verdadera devoción y al que ha ido abriendo camino, ayudándole a deselvorverse y cumplir el protocolo en los diferentes actos oficiales a los que acuden.

Pero si a la princesa Elisabeth el protagonismo de la casa, le duró poco, a su hermano, el principe Gabriel, tambien. En octubre del 2005 llegaría un nuevo hermanito, el príncipe Emmanuel, tercero en la línea sucesoria y un estupendo compañero de juegos para los dos pequeños príncipes, quien aún tendrían que hacer un hueco más, para la llegada de su hermana pequeña, la princesa Eleonore.

Elisabeth ha ejercido a la perfección de hermana mayor y ha sabido cuidar con dedicación y cariño a sus hermanos. En la imagen, la princesa Matilde, con su nueva hija, la princesa Eleonore, en brazos, posa junto a su esposo, el príncipe Felipe, y sus otros tres hijos, los príncipes Elisabeth, Gabriel y Emmanuel, en la presentación a los medios informativos de la recién nacida.

La hija de los reyes de Bélgica, la primera mujer heredera al trono belga tras la abolición de la Ley Sálica en 1991 y también ha sido la primera princesa europea de su generación en tener una agenda oficial propia. En la imagen, Elisabeth junto a su padre y su abuelo, Alberto de Bélgica en junio de 2008. 

Elisabeth de Bélgica, además de tener tratamiento de Alteza Real y ostentar el título de Princesa de los Belgas, también posee el de duquesa de Brabante que tradicionalmente ostentan quienes se encuentran en el primer lugar en la línea de sucesión.

La princesa Elisabeth, llamada a ser Reina de los belgas algún día, asistió, en septiembre de 2011, con diez años a su primer acto oficial para inaugurar un hospital infantil con su nombre en la ciudad de Gante. La pequeña saludó a los asistentes tal y como su madre le ha enseñado e incluso dio un pequeño discurso de inauguración. 

La duquesa de Brabante dio una lección de entereza en el funeral de su tía abuela Fabiola de Bélgica, fallecida el 5 de diciembre de 2014. Vestida de luto riguroso al igual que su hermana Eleonore, y sus dos hermanos, Gabriel y Emmanuel con traje gris, se encargó de consolarlos y cogerles las mano cuando las fuerzas les flaqueaban. 

En 2013, año de la coronación del Felipe de Bélgica, el rey se vio obligado a pedir guardaespaldas para todos sus hijos después de que la princesa Elisabeth recibiera una amenaza de secuestro. En la imagen, en la fila de atrás, la princesa Claire, el príncipe Laurent, la reina Fabiola, Matilde y Felipe de los Belgas, el rey Alberto y su mujer, la reina Paola, la princesa Astrid y el príncipe Lorenz. En primera fila, la princesa Eleonore, el príncipe Gabriel,la princesa Elisabeth y el príncipe Emmanuel. 

Dio su primer discurso oficial a los doce años en Ploegsteert (Flandes Occidental) durante los actos de recuerdo de la primera guerra mundial. Ante sus orgullosos padres, los Reyes de los belgas, leyó un mensaje de paz escrito por ella misma en los tres idiomas oficiales: el flamenco, el francés y el alemán.

Elisabeth de Bélgica no tiene prisas por abordar su papel oficial profesionalmente: con agenda y paga. Por eso la Princesa no recibirá al cumplir sus 18 años la dotación que le corresponde- 920.000 euros anuales- como Heredera al trono. Los reyes Felipe y Matilde han decidido que su hija termine primero sus estudios con total tranquilidad y solo después comience a recibir la asignación estatal, que conlleva un repertorio de actividades, la contratación de empleados y un control parlamentario de gastos.

La hija mayor de los Reyes Matilde y Felipe es la primera heredera al Trono de los belgas que comenzó sus estudios en neerlandés, en lugar de en francés. Además domina el inglés y el francés y está aprendiendo alemán; ha dado clases de piano durante muchos años y le gustan muchos estilos musicales. Muy amiga de sus amigos, valora mucho la amistad y habitualmente queda con su grupo de amigos. En la imagen, Elisabeth junto a su padre el rey Felipe en una fotografñía de enero de 2017.

Hereda de la belleza de su abuela la reina Paola, Elisabeth es muy deportista, esquía con regularidad, juega al tenis, practica la vela y el submarinismo. Es una amante de la Naturaleza, le encanta el trekking y le apasiona cocinar. En la imagen, la Princesa en los actos conmemorativos del Día Nacional de julio de 2018.

En su tiempo libre, también es voluntaria para ayudar a niños con dificultades de aprendizaje, ancianos, personas sin hogar y personas con discapacidades. A partir de ahora y una vez cumplida la mayoría de edad, podrá incluso llegar a ejercer como regente en momentos puntuales siempre que se la requiera. 

La hija mayor de los reyes Felipe y Matilde avanza como Heredera al trono e igual que sus homólogas, la princesa Leonor, Amalia de Holanda o Ingrid Alexandra de Noruega,  y en el último año ha apretado la marcha de su andadura institucional en el último año. Este pasado mes de junio llevó a cabo su primer viaje oficial al extranjero, concretamente a Kenia donde acompañó a su madre, la reina Matilde, en su papel de representante especial de la UNICEF y UNAIDS.

Elisabeth asumió más protagonismo que nunca en la última celebración del Día Nacional de Bélgica, con un vestido floral de Natan, la firma preferida de la Reina Matilde y también una de las favoritas de la Reina Máxima. La heredera al trono de Bélgica demuestra de esta manera que a pesar de su edad está aprendiendo a definir su estilo y como muchas chicas de su edad se ha declarado fan de Zara, luciendo muchas de las prendas del imperio de Amancio Ortega. 

Actualmente, Elisabeth se encuentra en Gales estudiando segundo de Bachillerato Internacional en el UWC Atlantic College, una prestigiosa institución a la que también acudieron en su día la reina Sofía, el rey Guillermo de Holanda y el príncipe Carlos de Inglaterra y cuyo método educativo se basa en el pensamiento de Platón. Haciendo una excepción, la princesa ha regresado estos días a casa para celebrar junto a los suyos su 18 cumpleaños, antes de retomar de nuevo sus estudios. Por este motivo, la Casa Real Belga distribuía estos días una serie de imágenes, en las que que se puede apreciar el impresionante cambio físico que ha dado la futura Reina de los belgas.