El retraso de una hora del tren en el que viajarían hizo que el Príncipe Harry y Meghan Markle llegaran a Gales pidiendo disculpas a la multitud por su retraso. Los fanáticos de la realeza que se reunieron a las afueras del Cardiff Castle no tuvieron problema en esperar desde las siete de la mañana para poder dar un vistazo a la pareja del momento. Por supuesto, cada minuto valió la pena, pues como se ha hecho una costumbre desde el anuncio de su compromiso, Harry y Meghan se dedicaron a saludar a las personas y agradecerles sus buenos deseos con una enorme sonrisa en el rostro.
Por supuesto, nadie quería perderse un detalle del look de la novia, quien una vez más ha apostado por un messy bun, como lo hizo la semana pasada en su primera aparición de este año. La actriz apareció con un espectacular abrigo negro con un cintillo a forma de moño en satín del mismo color de la firma Stella McCartney con un precio de 1,350 libras esterlinas (alrededor de $35,775 pesos mexicanos). Una vez más, Meghan recurrió a unos estilosos pantalones, en esta ocasión en versión skinny de la marca galesa Hiut Denim –haciendo un homenaje al lugar que los recibía- con un precio de 175 libras esterlinas (aproximadamente $3,678 pesos mexicanos).
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Después se vería que debajo del abrigo y el foulard negro, Meghan lucía una blusa con escote off-the-shoulder en una versión del estampado Príncipe de Gales de la firma Theory con un precio de 495 dólares ($9,405 pesos mexicanos) pero que está en rebaja por solamente 198 dólares (alrededor de $3,762 pesos mexicanos) aunque se encuentra totalmente agotada. Las botas de Tabitha Simmons de 825 dólares (aproximadamente $15,675 pesos mexicanos) fueron el toque final de este outfit. Aunque el punto más especial no fue otro que una bolsa de DeMellier London en verde –de 165 libras esterlinas (algo así como $4,372 pesos mexicanos), que en contraste con el total black look hacía un guiño a la bandera galesa. Por supuesto, se espera que la pieza vuele de los aparadores como ha sucedido con los otros bolsos que ha lucido.
Dentro del palacio que tiene más de 1,000 años de historia, escucharon presentaciones de músicos y poetas, además de conocer a deportistas galeses que se dedican a la difusión de la importancia de mantener viva la lengua local así como la identidad galesa como parte del Welsh Cultural Festival.
