Cada vez más novias eligen llevar velo el día de su boda. Aunque hubo un tiempo en el que este complemento se reservaba solo para enlaces muy clásicos, en los últimos años hemos asistido a una recuperación de este complemento que no solo las convence a ellas, también a los diseñadores. Y es que los creativos han sido los verdaderos culpables del regreso de este accesorio que imprime a quien lo lleva aura mágica y las transforma realmente en novias. Lo más llamativo es que, aunque el velo se puede llevar cubriendo o no el rostro, son muchas las prometidas que apuestan por ir veladas a su boda, dejando imágenes tan bonitas como estas.
María, la novia de la imagen, lleva un vestido de Sole Alonso y un sencillo velo de tul.
- Las imágenes más bonitas del rito de la velación que harán que quieras incluirlo en tu ceremonia