¿Dónde quedaron las tiaras de la familia?
Al igual que Corsini, Palazuelo optó por una larga cola desmontable que se convirtió en la protagonista del enlace, pero no, no era la cola típica que solemos ver en las bodas reales y de la alta sociedad. En esta ocasión, nacía como una ligera capa de organza sobre sus hombros y caía de forma majestuosa varios metros hacia el suelo aportando ese toque regio al traje. Tampoco llevó velo, ni tiara, ni las joyas de la familia política, a pesar de ser la primera boda de un heredero de la Casa de Alba que se celebrabra después de 30 años. Sofía optó nuevamente por la sencillez que tanto la caracteriza y lució un delicado tocado de plumas blancas en forma de 'U' de la diseñadora Teresa Briz que añadió a su moño bajo tipo bailarina, unos pendientes colgantes y una pulsera, ambas en oro blanco. Y sí, fue ella la primera novia que rompió con la tradición familiar de no llevar tiara camino al altar, un hecho que la ha unido directamente con su cuñada Belén Corsini.