Lo cierto es que Kim también se volvió muy protectora de su tan querido personaje, sobre todo por la trama que tendría en la tercera película, en la que supuestamente Samantha recibiría fotos subidas de tono del hijo de 14 años de Miranda Hobbes (interpretado por Cynthia Nixon)... algo que la decepcionó y desalentó por completo a participar.
"Es doloroso", dijo al medio antes citado, argumentando un mejor rumbo de la publirrelacionista: "¿Por qué Samantha, quien es dueña de su compañía de Relaciones Públicas, ¿tal vez la hubiera tenido que vender por problemas financieros? El 2008 fue duro. Mucha gente sigue recuperándose. La tuvo que vender a un chico con sudadera de gorra, y ese es el dilema que tiene. Digo, ese es un escenario que estaba en la mente de mis representantes, y pensé que era una muy buena idea. Ese es un buen conflicto. En lugar de algo con un menor...", expresó.