Para evento de día, tarde o noche, el vestido-capa se ha convertido en una elección que fascina a las royals. Cortos o largos, la realidad es que esta tendencia de fiesta en sus diferentes opciones ha conquistado los vestidores de palacio. De hecho, ha sido la protagonista de algunos de los looks más inolvidables de la realeza, véase los estilismos de Meghan Markle o Kate Middleton. Y es más, hay quienes han llegado a conectar su elecciones a través de un mismo diseño, como les ocurrió a doña Letizia y Carolina de Mónaco con su diseño rojo de Stella McCartney. Ayer mismo, Matilde de Bélgica se convertía en la última en recordar este éxito de moda durante un acto religioso en la Iglesia de Notre-Dame de Bruselas (Bélgica). Su elección, una propuestas en color gris y largo midi que coordinó con una diadema a juego.