En su charla, Pati recordó cómo vivió ese día y habló del instante en que, bajo medidas de seguridad especiales, tuvo que abandonar la televisora. “Yo termino de transmitir Ventaneando y Nacho Morales, que en paz descanse, que era uno de los ejecutivos de la empresa, me llama y me dice: ‘Oye Pati, te tengo que platicar que hay una orden de arresto. Es Televisa, te tenemos que sacar de las instalaciones en un auto, -no encajuelada como se dijo, pero sí cubierta de manera de que no me vieran-, para llevarte a tu casa porque afuera de tu casa y afuera de Azteca te están esperando las autoridades para arrestarte…”, explicó, rechazando haber tenido miedo. “Estaba muy sorprendida. Yo no entendía la magnitud del problemón. No entendía. Yo dije: ‘¿Cómo? Estoy trabajando. Es mi trabajo, no he cometido un delito, no he matado a nadie, pago mis impuestos. ¿Por qué la saña?’…”.