Por otro lado, la también empresaria destacó el hecho de que en una relación de amistad y laboral de más de 30 años es normal que haya este tipo de desencuentros y que lo verdaderamente importante sea siempre encontrar puntos de acuerdo para lograr solucionar cualquier conflicto. “Yo creo que las peleas, las separaciones, los distanciamientos, en una relación de 30 años, en algún momento tenían que llegar, era inevitable, desgraciadamente nos alcanzó ese momento y sucedió lo que se hizo tan público, pero creo que el aprendizaje es, finalmente, saber que los amigos se cuentan con los dedos de las manos”, expresó.