La incomodidad de Melania durante el funeral de la ex de su esposo era comprensible, pues recordemos que, en 2017, Ivana hizo unas declaraciones al programa Good Morning America en las que de alguna forma invalidó la figura de primera dama que ostentaba en aquel entonces Melania, asegurando que ese puesto le correspondía a ella debido a que había sido la primera esposa de Donald Trump. “(Donald y yo) Hablamos cada 14 días. Tengo el número directo de la Casa Blanca, pero no me gusta llamar a menudo ahí porque está Melania y no quiero causar ningún tipo de envidia, al fin y al cabo, yo soy la primera señora Trump, soy la primera dama, ¿ok?”, expresó Ivana, quien entonces se encontraba en plena promoción de uno de sus libros.