Ante los rumores de su mala relación, Ivanka y Melania Trump se enfrentan en un duelo de estilo

El mismo día en el que se dio a conocer la operación ‘Boycott Ivanka’, en la que supuestamente, según el libro escrito por el exmejor amiga de la Primera Dama de Estados Unidos, Melania Trump habría hecho todo lo necesario para que Ivanka Trump no figurara en la investidura como presidente de Trump, las mujeres se han visto las caras. Fue en el último día de la Convención del Partido Republicano, cuando ambas mujeres aparecieron en el escenario y todas las miradas se posaron sobre el encuentro. La mueca que hizo Melania al saludar a su hijastra no pasó desapercibida para nadie, pues si bien pudo haber sido un mero reflejo, las redes sociales se dieron vuelo con la expresión.

Melania and Me, libro escrito por Stephanie Winston Wolkoff -quien trabajara en la Casa Blanca como parte del equipo de Melania y quien fuera su gran amiga desde que se conocieron en una MET Gala-, describe la constante enemistad entre las dos mujeres más importantes de la vida de Donald Trump. La constante supuesta búsqueda de Ivanka por figurar en la Casa Blanca y de tener una posición equivalente a la de la primera dama, es algo que se relata a través de distintos eventos. Desde la intención de Ivanka de cambiar el nombre de la Oficina de la Primera Dama a la Oficina de la Primera Familia, hasta los malabares que tenían que hacer para que Ivanka y Jared Kushner no ocuparan con su equipo las oficinas destinadas a Melania. Aunque el momento más álgido llegó cuando Ivanka quiso tener un papel principal en la investidura, algo que Melania evitó con la ayuda de Stephanie, al grado que se eligió el orden para sentarse con el fin de que no se tomaran imágenes de Ivanka.

Para una ocasión como esta, Melania Trump decidió elegir un vestido de impacto. Si el primer día de convención eligió un traje de saco y falda de lápiz de Alexander McQueen en verde militar, y el segundo quiso irse al otro extremo con un elegante vestido de inspiración romántica en rosa de Jason Wu, para su última aparición eligió un llamativo vestido en verde, que en las imágenes se captaba como fosforescente de Valentino.

A pesar de que éste podría ser un color poco recomendado cuando se va a utilizar en televisión, parece que Melania quería salir a partir plaza con un look que no ha dejado a nadie indiferente. El elegantísimo vestido plisado con capa hasta los pies incluida tiene un precio original de 2,708 libras esterlinas (alrededor de $78,955 pesos mexicanos) , pero rebajado se puede encontrar por 1,354 ($39,477 pesos mexicanos, aproximadamente). Eso sí, a pesar de que el diseño por sí solo es ideal, Melania no quiso dejar de lado su infaltable cinturón, agregando un modelo muy delgado en rojo que combinaba con sus stilettos. Aunque nadie le dice que no a un diseño de Valentino, en redes sociales Melania ha vuelto a ser muy criticada por no llevar un diseñador estadounidense.

En contraste con el vistoso look de Melania, Ivanka apareció con un estiloso pero sobrio traje. Más rubia que nunca y con la melena en lacio perfecto, Ivanka llevó un traje con la parte superior off-the-shoulder , cuello en V y un ligero peplum que se contraponía con su estructurada silueta con unos pantalones de seda en el mismo color.

Al igual que sus hermanos y cuñadas, Ivanka también fue responsable de dar un discurso en favor de su padre, por el momento en el que le tocó hacerlo, podría considerarse que fue el más importante. En él dijo: “Reconozco que el estilo de comunicación de mi papá no es del gusto de todo mundo. Y sé que sus tweets pueden sentirse un poco no filtrados, pero los resultados hablan por sí mismos”. La idea detrás del mensaje parece muy similar al de su hermana Tiffany, quien pidió no caer en la retórica y enfocarse en los resultados.