Ariadne Díaz y Marcus Ornellas han encontrado en Puerto Vallarta el lugar ideal para refugiarse como familia y comenzar una vida lejos de las cámaras y los foros de televisión, disfrutando plenamente de todas las etapas de su hijo, el pequeño Diego, de cuatro años, mientras la actriz se prepara su regreso para la televisión. Es por eso que la familia se ha hecho de una hermosa casa de playa, en donde han pasado los últimos años de su vida, estableciéndose de forma indefinida en este paradisiaco destino del estado de Jalisco.