Sin duda alguna, la MET Gala es uno de los eventos más esperados del año, pues es la oportunidad perfecta para ver a las estrellas más importantes desfilar con atuendos que difícilmente veríamos en otras alfombras rojas, pues cada año se fija un tema en especial para que los asistentes y diseñadores tomen inspiración a la hora de crear sus looks. Este año, será el fallecido Karl Lagerfeld el homenajeado, por lo que el universo del 'Káiser de la moda' se apoderará de este importante evento. Es por eso que los organizadores de la gala han querido tener presente a alguien que fue muy importante en la vida de Karl y por quien el artista tenía un cariño muy especial. Se trata de su gatita Choupette -que era la adoración del diseñador y su fiel compañera-, quien ha sido invitada a ser parte de la gala que se llevará a cabo, como ya es tradición, el primer lunes de mayo en Nueva York.

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La tierna gatita de ojos azules podría convertirse en la celebridad más esperada de la alfombra, si es que sus cuidadores aceptan la invitación, por lo que de ser así, la veríamos desfilar al lado de otras grandes estrellas, quienes se darán cita en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York, para rendir un merecido homenaje al icónico diseñador y celebrar su legado. Bajo el título Karl Lagerfeld: A Line of Beauty, el MET albergará una exhibición en la que se podrán observar algunos bocetos del artista y más de 150 piezas creadas por él. Es por eso que se espera que las estrellas y personalidades invitadas se inspiren en todo el universo del Lagerfeld, por lo que incluso podremos ver en sus looks algunos guiños a la tierna gatita.

La razón por la que Choupette ha sido invitada

Más allá de ser la mascota de Karl Lagerfeld, la hermosa gata se ha convertido en toda una celebridad e influencer, pues actualmente cuenta con más de 134 mil seguidores en redes sociales, los cuales ha ido acumulando incluso desde antes de la muerte del diseñador, en 2019. Chouoette, que actualmente tiene 12 años, estuvo al lado de Karl desde que era una cachorra, aunque originalmente perteneció al modelo Baptiste Giabiconi, quien en un viaje de descanso, le pidió al diseñador se hiciera cargo de ella, quedando Lagerfeld completamente enamorado de ella, por lo que se negó a devolvérsela. La vida de Choupette al lado de Karl fue buena, pues se la pasó viajando de avión en avión, acudiendo a la oficina con su dueño y hasta protagonizando algunas sesiones fotográficas.

Algunas de las colecciones del Káiser para su firma homónima han estado inspiradas en su gata, siendo su silueta la protagonista de bolsos, gafas de sol, guantes, pañuelos... Ahora Chopette (que en francés significa 'cariño') lleva una vida algo más tranquila junto a Françoise Caçote, ama de llaves del diseñador, quien se encarga ahora de su cuidado y de llevar sus redes sociales. Cabe destacar, que aunque se llegó a especular que la gatita sería la heredera universal de la fortuna del diseñador, valorada en 200 millones de dólares, no fue así, aunque su fallecido dueño se encargó de dejar todo establecido para que Choupette llevara una vida en la que no le hiciera falta.