Convertidos en una familia nómada, que lo mismo disfrutan de México, Sevilla, San Diego o cualquier parte del mundo, para los Hank Coppel, París siempre tendrá un significado muy especial pues fue en esta ciudad donde se dio el flechazo entre Bárbara Coppel y Alejandro Hank Amaya, por esta razón, para celebrar sus 44 años, la socialité eligió este destino para soplar las velitas de su pastel. A diferencia del inicio de su relación, esta vez, Bárbara y Alejandro contaron con la especial presencia de sus hijos Amaïa, Bastien y Killian a quienes, como a sus papás, les encanta visitar la capital francesa. De hecho, fue justo en París donde la pareja comenzó a escribir su historia familiar ya que los primeros dos años de su matrimonio vivieron en este lugar que vio nacer a su primogénita Amaïa.

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Feliz de poder celebrar un año más de vida en su lugar favorito, Bárbara Coppel utilizó su cuenta de Instagram para compartir algunos detalles de su especial festejo. Con una imagen familiar con la Torre Eiffel, como telón de fondo, la cumpleañera compartió con sus seguidores en Instagram, un poco de su festejo en el que, sin duda, la presencia de sus hijos, lo hizo uno de los cumpleaños más memorables: “Festejando por todo lo alto los 44. ¡Gracias!”, escribió la socialité como descripción de esta imagen en la que la vemos abrazando a sus pequeños, en uno de los jardines cercanos a la icónica torre, un sitio imperdible al visitar París.

Además de esta foto en su feed, Bárbara compartió varias historias de su festejo en París donde también posó al lado de su inseparable esposo, Alejandro Hank Amaya, a quien conoce desde que estudiaban la preparatoria; sin embargo, no fue hasta muchos años después de egresar de la escuela que sus caminos se reencontraron en París cuando, a través de un mensaje directo en Instagram, el torero le escribió para invitarla a tomar unos tragos. De acuerdo con la propia Bárbara, desde el día que se reencontraron ella quedó encantada con él: “Lo vi entrar y lo primero que me llamó mi atención fue su estatura, enorme”, comentó el año pasado durante su participación en el podcast La burra arisca.

Tan divertida como en su primera cita, la pareja posó muy enamorada en el cumpleaños de Bárbara donde, una noche antes, disfrutaron de una cena en la que disfrutó de la compañía de un grupo de amigos en el que destacó la presencia del director mexicano, Manolo Caro, quien es muy cercano a los Hank Coppel, de hecho, el verano pasado vimos al cineasta y a la pareja disfrutar de las aguas de Ibiza que recorrieron a bordo de un yate en el que también iba abordo el actor Alejandro Speitzer, otro gran amigo de Bárbara y Alejandro. Además de la cena entre amigos, Alejandro consintió a su esposa con una romántica comida en un restaurante con espectacular vista a París.

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Una familia nómada

El año pasado, Bárbara Coppel habló del divertido estilo de vida que tiene con Alejandro Hank con quien comparte su pasión por viajar, razón por la que se consideran una familia nómada: “Recién casados vivimos en París, tuve a mi primera hija. De ahí, nos fuimos dos años a San Diego y en San Diego dijimos: ‘Vamos a remodelar la casa’ y Alejandro tiene negocios en Sevilla, nos fuimos y vivimos la vida en Europa que tanto nos gusta a ambos, íbamos por 4 meses, que era lo que se iban a tardar en remodelar la casa y resultó que a las dos semanas, encerrados (…) Ya llevamos dos años en Sevilla, estamos de regreso aquí en San Diego, nos vamos a quedar hasta Navidad, luego regresamos al año escolar en Sevilla, lo queremos hacer de aquí a que podamos, porque yo creo que nuestro instinto es ser nómada”, explicó la socialité en el podcast citado.