Son unos cuantos los que pueden presumir de haberse hospedado en el Palacio de Buckingham. La residencia oficial de la Reina Isabel es uno de los pocos palacios en el mundo que sirve tanto como de oficina de trabajo como de hogar para la monarca. Es por esto que durante las visitas de Estado, da morada a sus invitados, que suelen ser las personas más relevantes del planeta. Entre ellas está Michelle Obama, quien cuando era Primera Dama de Estados Unidos, pudo disfrutar de este lugar. Fue durante un panel en el evento MUSE, de Kick Health, que recordó aquella experiencia inolvidable.
¿Cómo son las habitaciones del Palacio? “Todo es dorado. Vimos el cuarto del oro, hay una habitación en la que tienen todo el oro. Era cumpleaños de Sasha y la Reina abrió la casa y nos dejó entrar para ver ese cuarto”, narró Michelle. A pesar de ser experta en cenas diplomáticas, hubo algo que sorprendió a Michelle. “En el banquete de Estado, el plato que pensé era la base, ese era el plato. Ponen la comida en la base de oro”, siguió contando emocionada.
Y aunque podría parecer que un palacio de más de 300 años tiene todo tipo de lujos, hay un detalle que Michelle considera podría ser mejor. Ante la pregunta expresa de que en dónde se cocina mejor, de forma muy diplomática dio su respuesta tras haber vivido ocho años en la Casa Blanca. “No quiero insultar a nadie. La comida estadounidense es simplemente mejor”, eso sí, los británicos también tienen su propio triunfo, “Ellos tienen mejores vajillas”.
Al ser cuestionada sobre si estaba nerviosa de dormir en casa de la Reina, respondió sincera, “Creo que para el momento de ir dormir ya habíamos interactuado lo suficiente con ellos”. Y no solo no estaba nerviosa, sino que con el paso de las reuniones de los Obama con la Familia Real británica, la relación se ha hecho mucho más cercana. “Lo sorprendente, es que ellos quieren ser tratados normalmente. Todos son felices cuando la gente se ha ido”, dijo sobre los Windsor con los que ha tenido relación.
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Por supuesto, uno de sus comentarios hizo recordar aquella vez en la que rompiendo el protocolo Michelle abrazó cariñosamente a la Reina. “Ellos quieren ser abrazados. Ellos quieren que los toquen. (Y) cuentan chismes”, dijo divertida la ex primera dama que seguramente estará entre los invitados a la boda del Príncipe Harry, con quien ha desarrollado una cercanísima relación. Aunque se ha dicho mucho que esta invitación podría ser una falta de protocolo, al ser cuestionado al respecto, Harry dijo que todavía no sabía si Barack Obama estaría entre los invitados y que “no quería arruinar la sorpresa”.
