Es una de las plantas medicinales más utilizadas como remedio casero, pues no son pocas las personas que tienen incluso un aloe vera en casa y hacen uso de su gel siempre que es necesario. La planta como tal puede parecer que tiene una imagen de cactus, pero no lo es, aunque sí que suele crecer en climas cálidos. Para que crezca precisa un sustrato necesario, que debe ser rico en minerales y arcilloso.
Sus propiedades beneficiosas son muy conocidas. “Si hacemos un pequeño anticipo, podemos decir que, de forma interna, es muy détox, tiene propiedades depurativas, laxantes y de protección estomacal. Mientras, como uso tópico, sobre todo destacan las antiinflamatorias y, sobre todo, es ideal frente las irritaciones y posibles quemaduras, no solo las solares”, nos cuenta la farmacéutica Meritxell Martí.
“De la planta se usa, principalmente el látex y el gel. El gel es la parte mucilaginosa, que se encuentra en la parte mas interna de las hojas. Es rica en glucomananos, aminoácidos, lípidos, esteroles y vitaminas. En la parte mediana de la hoja es donde se encuentra el látex, un líquido de color amarillento, y contiene los glucósidos y las antraquinonas. La parte más externa es la que protege la hoja y contiene las proteínas y carbohidratos (el córtex)”, nos cuenta la experta.
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