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Llegan esos días del mes, previos y durante la menstruación en los que te sientes más hinchada, tanto, que puede ser que aumentes incluso de peso. Lo confirma la doctora Teresa Vázquez, del Servicio de Ginecología del Hospital Sanitas CIMA. “El 70% de las mujeres experimentaron aumento de peso con la menstruación. Además, ese aumento de peso se acompaña de otros síntomas como: aumento de dolor, hinchazón, irritabilidad, malestar…”, nos detalla, y añade que es un hecho común y totalmente normal, no debe ser motivo de preocupación, ya que normalmente se recupera el peso normal pasados esos días del ciclo menstrual.
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¿Cuánto peso se puede llegar a ganar?
Le planteamos a la doctora si tienen datos de cuánto puede aumentar nuestro peso en esos días del mes. “Aunque parezca mentira, durante la menstruación se puede llegar a aumentar el peso hasta en 2 o tres kilos por encima de nuestro peso habitual”, nos comenta. “Pero eso hay que tomárselo con calma, ya que ese peso es mayoritariamente agua que el cuerpo retiene durante el proceso, y, cuando el período llega a su fin esos kilos desaparecen y puedes volver a entrar en tus jeans”, asevera.
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Por qué se produce esa ganancia de peso
Como es lógico, nos planteamos cuáles son las causas de que esto suceda, si tienen culpa las hormonas o el proceso inflamatorio que se experimenta en el cuerpo de la mujer durante la menstruación. La especialista lo tiene claro: “Efectivamente son las hormonas las principales responsables”. Y nos cuenta que la progesterona y los estrógenos favorecen la retención de líquidos y la tensión mamaria. “La acción de esas hormonas juega un importante papel en el metabolismo del agua corporal e influyen en la retención de líquidos. La progesterona estimula una moderada retención de agua y sal por parte del riñón, lo que se traduce en un discreto aumento del peso corporal y de acumulación de líquido en los senos, abdomen y miembros inferiores, originando más pesadez de piernas”, cuenta la especialista, que añade que este efecto ‘congestivo’ se ha llamado ‘Síndrome de tensión premenstrual’.
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Cuidar nuestra dieta
Para tratar de mantener bajo control este aumento de peso, debemos cuidar la alimentación en los días previos a la menstruación y durante la misma. “La alimentación es otro factor desencadenante del aumento de peso debido a la acción hormonal, ya que al estar más decaída en esos días se eligen alimentos más dulces y más salados y ricos en calorías. Este factor negativo influye en la ganancia de peso. Al estar más decaída, se hace menos ejercicio y aumenta la sensación de mayor ganancia de peso”, nos detalla. Por lo tanto, es fundamental cuidar la alimentación. Las pautas principales que nos da la doctora con este objetivo son:
- Controlar la sal.
- Disminuir el consumo de cafeína (el abuso de la cafeína puede hacer sentir más molestias gastrointestinales e hinchazón).
- La ingesta de alimentos diuréticos (como la piña, calabacín, espárragos, alcachofas…)
- Beber abundante agua.
Y nos comenta que es muy importante hacer más ejercicio, como el yoga, ya que se ha comprobado que colabora en la disminución de los dolores menstruales y a la disminución de peso.
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Controlar los antojos
Muchas mujeres ven cómo aparecen, además, coincidiendo con la menstruación, los antojos, ¿cómo podemos controlarlos? “En una 80 % de las mujeres aparecen antojos durante la menstruación, ya que las fluctuaciones hormonales afectan a los neurotransmisores. A tu cuerpo se le antojan carbohidratos, grasas y dulces, y se recurre a estas comidas y tentempiés de mayor contenido calórico. Es un intento de aumentar los bajos niveles de serotonina que produce el cuerpo”, nos detalla la experta. Y es que, además, estas hormonas del bienestar también son necesarias para combatir los cambios de humor que hacen que la mujer se sienta triste en esos momentos del mes.
“El cambio en los niveles de estrógenos y progesterona justo antes de la menstruación puede hacer que apetezca más carbohidratos y azúcares. Algunos investigadores creen que los péptidos endógenos que controlan el apetito son más activos durante el ‘Síndrome de tensión premenstrual’. El vínculo entre niveles de estrógenos, insulina y azúcar en sangre afecta a los antojos de comida con el consiguiente aumento de peso. Los antojos son solamente un síntoma del síndrome premenstrual. La mujer se puede sentir también irritable, ansiosa, tensa o triste, o una combinación de todo ellos en esos días determinados. Si bien es posible utilizar algunos alimentos como muleta emocional, los antojos de otros alimentos pueden crearse en la cedulas y glándulas. Por ejemplo, la necesidad de comer chocolate puede provenir de algo más que un apego emocional”, cuenta la ginecóloga de Sanitas.
Después de lo dulce, el antojo más común es la comida salada. Cuando las hormonas fluctúan las glándulas suprarrenales trabajan más para regularlas, necesitan más minerales (como a sal) para mantener el ritmo. “Para alimentar esa necesidad sin darse un atracón de patatas fritas, se puede utilizar sal marina, comer verdura rica en agua y alejarse de productos enlatados”, nos dice y nos da un par de consejos útiles para sobrellevar los antojos:
- Durante la regla no es el mejor momento para ver esa serie de Netflix supertriste, con ello solamente aumentan las ganas de azúcar, hay que alejarse de ello.
- Beber de 6 a 10 vasos de agua al día. Ello ayuda a que los minerales fluyan hacia son necesarios. Así que: ¿un vasito de agua?
Una ganancia de peso temporal
Y, sobre todo, hay que pensar que se trata de una ganancia de peso temporal. “Pasada la menstruación, todo vuelve a su sitio y se puede volver a lucir el cuerpo auténtico. Y, como su nombre indica, es cíclico, así: ¡Hasta el próximo ciclo!”, concluye la experta.
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