'Fitnes'

Evita las consecuencias de la fatiga muscular

Puede provocar lesiones al correr y ejercitarte, estos son algunos consejos para prevenirla

Por Laura Bech

La fatiga muscular es la pérdida de la capacidad muscular para producir fuerza. Tal vez te haya ocurrido, tienes todo preparado para tu rutina de ejercicio y, de repente, sientes un cansancio que no te permite comenzar

Se puede producir por muchos motivos un exceso de entrenamiento, el estrés o la mala alimentación. También puede darse por una combinación de estos tres factores. Lo mejor, si estás ante esta situación, es que dejes de lado el entrenamiento por unos días y averiguar a qué se debe tu fatiga muscular. Las lesiones suelen aparecer cuando sales a entrenar a pesar de este cansancio en los músculos.

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Algunos consejos para evitar la fatiga muscular

La fatiga muscular aparece, en muchas ocasiones, cuando el nivel de calcio es bajo o insuficiente y no llega a producir la relajación y contracción muscular de una forma adecuada. Otro factor que puede originarla es la falta de glucógeno muscular, la acumulación de ácido láctico a nivel muscular y la deshidratación. 

Si el origen se debe a una escasa o mala ingesta de nutritientes puedes sumar a tu dieta productos que contengan calcio, como la leche, el yogurt y el queso. Si, la fatiga muscular es ocasionada por la falta de glucógeno muscular es importante remarcar que va a depender de la cantidad de masa muscular de cada persona, el entrenamiento que hace y el porcentaje de hidratos de carbono que consuma. De manera generalizada, se estima que debe consumirse 1 gramo de hidratos por cada kilogramo de peso. Pero para esto es recomendable consultar con un especialista para que elabore un plan alimentario sumando otros elementos para el cálculo como la edad o la resistencia física.

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Por último, si la fatiga muscular aparece por el exceso de ácido láctico, liberado después de hacer actividad física intensa, impide que las moléculas de glucosa se rompan y nuestro organismo pueda obtener energia.

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Es probable que tu entrenamiento no sea el adecuado

La fatiga muscular puede aparecer, como hemos visto, en cualquier momento. No se trata de perder uno o dos días de entrenamiento, lo peor puede darse si omites este síntoma y decides lanzarte a la carrera. Las lesiones ocasionadas por la fatiga muscular pueden resultar peor que el malestar, incluso llegar a ser irreversibles. 

Además de los factores ya mencionados, evita el consumo de tabaco, alcohol y, por supuesto, drogas si tienes una rutina de entrenamiento físico intensa. Duerme y descansa, sobre todo antes de una carrera. Si tomas medicamentos para otra sintomatología puede causar efectos colaterales como la fatiga muscular. Lleva una alimentación saludable y controla de manera periódica el nivel de de hierro en sangre y el funcionamiento de la glándula tiroides. Planifica tu entrenamiento, si es necesario, ponte en manos de un experto que. El sobreentrenamiento, la monotonía y la alta intensidad pueden generar el cansancio extremo de tus músculos. Calienta y estira, tanto antes como después de cada entrenamiento. 

La importancia de una correcta hidratación cuando entrenas

Si llevas una vida activa y el entrenamiento es parte de tu rutina diaria seguro que conoces la importancia de una correcta hidratación. El agua, la mejor bebida para hidratarnos, debemos tomarla a lo largo del día. Uno 8 vasos, repartidos en distintos momentos. Si haces running mantén la ingesta de agua durante la carrera, aunque te será imposible tomar un vaso de agua, intenta hacerlo con pequeños sorbos, pero no sobreesfuerces al organismo dejándolo sin líquido suficiente. 

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