Esta semana ha empezado la primavera y, aunque a pesar de las alergias y la astenia, estamos deseando que llegue el buen tiempo, el cambio de armario nos produce cierta angustia y, sobre todo, mucha pereza, incluso con un vestidor XL. Este decálogo del orden viene a tu rescate, para que, además de sacar la ropa veraniega y guardar la más invernal, puedas hacerlo sin ‘morir en el intento’ y sin abarrotar el dormitorio con cestas y bolsas.
1. Elige el momento adecuado
Tienes que verlo como una oportunidad de ‘ventilar’ y renovar tu armario y de paso tu vida. Por ello, resérvate una una mañana o una tarde del fin de semana para empezar y terminar, no lo demores mucho más. Eso sí, rápido no significa corriendo. Todo lleva su tiempo, pero con estas súper ideas prácticas, tardarás menos porque aprovecharás al máximo cada minuto.