¿Tu jardín te parece demasiado formal y quieres añadir un aire silvestre, como de campo? Lo conseguirás cultivando plantas que conserven ese aire rústico.
El brezo rosa (Erica gracilis) es una de ellas, una planta arbustiva de pequeño tamaño que llenará el espacio de color. Toma nota de las atenciones que debes procurarle para que crezca preciosa.
Una planta versátil
Si tuviésemos que otorgar al brezo rosa una característica que defina su cultivo diríamos que es una planta versátil. Aunque procede de Sudáfrica y está acostumbrada a entornos cálidos, se adapta de maravilla a todo tipo de climas soportando, incluso, bajas temperaturas.
Esta especie arbustiva cumplirá en tu jardín o en la terraza una función ornamental, si bien no podrás utilizarla para formar setos debido a su tamaño reducido, ya que por lo general no supera los 40 cm de altura. ¿Te animas a hacerle un hueco entre tus plantas?
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