6. El tipo de apertura
El espacio alrededor de la ducha, el plato y tus necesidades determinarán en parte el tipo de apertura. En esta propuesta de Leroy Merlin se combinan puertas fijas con correderas.
- Fija. Se pueden instalar a un lado u otro de la bañera, según su ubicación. Forma una 'pared', cuyas dimensiones deben ser suficientes para blindar las salpicaduras de agua, sin obstaculizar la entrada y salida de la bañera ni el paso de la luz. Si bien es particularmente fuerte y duradera, puede resultar algo incómoda si tienes que duchar a un niño.
- Abatible. Se abren hacia fuera o hacia dentro. Fáciles de limpiar, ten presente que debes tener suficiente espacio delante (unos 45 cm), por lo que no son la mejor opción en baños mini.
- Plegable. Son las tipo acordeón. Se abren hacia dentro y no restan metros, aunque en ocasiones puede tener fugas leves en sus articulaciones.
- Correderas. Son las más estancas y las preferidas por casi todos. Perfectas para baños pequeños, las puertas se deslizan hacia los lados por un carril.
- Pivotante. Al abrirse parte de la hoja se introduce dentro de la ducha, por lo que no necesita el espacio de fuera.