Puede que no acabes de ver la opción de colocar la cama delante de la ventana, como si esta fuera el cabecero. Pero hay ocasiones en las que es la única opción para sacar partido al espacio. En otros páises, esta práctica está algo más extendida, aunque en España nos cuesta. Somos más de levantarnos y disfrutar de las vistas que dejarlas a nuestra espalda. Pero si te gusta la idea o te ves obligado a optar por ella, estos dormitorios te servirán de inspiración.
Un buen aislamiento
Es fundamental que si colocas la cama debajo de la ventana en el dormitorio cuentes con un buen sistema de aislamiento y materiales de calidad. Por un lado el aislamiento del tabique en sí, de manera que no se caliente ni enfríe en exceso. Y por otro la perfilería y vidrios de la ventana. Siendo esto correcto, no se producen fugas ni pérdidas de calor ni tampoco entrada. Solo así conseguirás un buen descanso. Por supuesto, una opción si la habitación es larga pero estrecha con una ventana en uno de los laterales cortos es separar -como en esta propuesta de Kave Home- la cama y su cabecero (que concede intimidad a la cama en sí) algunos centímetros de la ventana.
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