Porque seas más moderno o rústico, porque tengas un jardín o un patio urbano o, sencillamente, porque sientes predilección por uno u otro tipo de piscina. Aquí tienes una guía de estilo en la que inspirarte y saber con cuál te sientes más identificado. ¡Date un chapuzón!

Es llegar el buen tiempo y las piscinas, sean como sean, se convierten en objeto (codiciado) de deseo. Cualquier casa quiere una piscina. Y no hablemos de sus propietarios. Las agua de agua con cloro, salada y naturalizadas o biopiscinas. Pero también su diseño marca diferencias. Descubre qué estilo de piscina va contigo, sueña y, quién sabe, quizá para el año que viene estés chapoteando en una de ellas en tu propia casa…

La piscina clásica, la más tradicional

Suele ser de obra, revestida en gresite o teselas en color azul y con un revestimiento alrededor en piedra en color claro. Las escaleras se encuentran en superficie en un lateral del vaso de la piscina y si cuenta con escalones para acceder en muchas ocasiones se acompaña de una barandilla de seguridad. Las puedes hacer del tamaño que quieras. Nunca fallan.

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Piscina combinada con 'jacuzzi'

Otro pequeño capricho y placer de la vida. Las piscinas de grandes dimensiones en ocasiones se combinan con un jacuzzi integrado, delimitado por un murete de manera que se crea un espacio independiente con los jets que convierten el área en jacuzzi. Así se ha hecho en este exterior con piscina proyectado por DT Estúdio.

Un multichapuzón

Varias piscinas, de agua fría, caliente, con burbujas, con cascadas… es un pequeño spa al aire libre. En este proyecto de Ferdinando Fagnola + PAT. architetti associati se han creado diferentes vasos de pequeñas dimensiones, concebidos como un espacio de relajación y para refrescarse sin poder nadar en estas piscinas.

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Integradas en un exterior de línea moderna

Sin césped, con pavimento solado, tumbonas actuales y minimalistas… todo en este exterior (diseñado por Espaço Objecto) se cuida al milímetro y la sencillez es la regla que hay que cumplir para disfrutar de un baño en esta piscina. La iluminación interior del vaso, por la noche, hace que siga siento protagonista del jardín.

Estrecha, a modo de calle

Son las piscinas urbanas por excelencia. Permiten nadar porque tienen el largo suficiente pero ganan espacio al ser estrechas y alargadas. Un rectángulo, como el de este exterior de CoDA arquitetos, que muchas veces se queda en “una calle” de una piscina olímpica. Pero suficiente para darse un agradable y refrescante baño.

Irregulares, de líneas rectas

No pensamos en la tradicional piscina en forma de riñón sino que hay piscinas irregulares que se adaptan al espacio y que resultan más originales como esta. Colocar la piscina en el extremo más alejado de la salida de la casa ofrece espacio para crear una zona de estar o de comedor, al tiempo, que hace que se disfruten de las vistas en caso de haberlas. Ten en cuenta además que las piscinas no solo se revisten con gresite sino que hay más acabados posibles con diferentes características en mantenimiento y que aportan otras tonalidades al agua, como esta con baldosas de Bernardes Arquitetura.

'Infinity pool'… allá donde las vistas te lleven

Estas piscinas sí que son para soñar. Se denominan infinity pool porque parece que no tienen bordes, que el vaso no se cierra y el agua cae y se prolonga más allá de la piscina en sí. Suelen colocarse en ubicaciones espectaculares donde las vistas se pierden en el horizonte.

La mínima expresión

Son piscinas de reducidas dimensiones (como esta de Root Design Company) para los que no quieren complicarse con su mantenimiento, los que solo quieren darse un baño para refrescarse, entrar y salir, o los que no tienen espacio para nada más. Porque las piscinas también son para terrazas y patios pequeños…

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'In & out'

Ni dentro ni fuera pero un poco de ambas. Esta piscina, por su ubicación, se puede disfrutar en verano abierta y en invierno cerrada, ya que queda aislada po los cerramientos. Además, está prácticamente integrada en el interior de la vivienda. Es una propuesta del estudio de arquitectura Hansi Ombregt.

En un patio, tipo alberca

Es un estilo más desenfadado, suele ser de reducidas dimensiones está hecha de un material enfoscado, muy hippie e ibicenca, al tiempo que rústica. Suelen construirse en altura por lo que su precio es más reducido que las que se excavan en la tierra.

Las piscinas también son para las terrazas

Allí donde hay un ático también puede hacer una piscina. Si bien es cierto que si estás pensando en hacer una, deberás consultar con un arquitecto y la comunidad de propietarios  (en el caso de un bloque de viviendas) para que te asesore sobre el peso que puede soportar la estructura. Pero si se puede hacer, tendrás un oasis en la terraza, como se ha proyectado en este piso de The Room Studio. Si te gusta el efecto de la madera alrededor de la piscina puedes optar por cerámica de exterior antideslizante acabado imitación madera, listones de madera tropical (necesitan mantenimiento) o composite o tarimas sintéticas.

Tropical, rodeada de vegetación

Como darse un baño en un lago pero en el lugar que elijas, rodeado de vegetación y en un ambiente muy tropical. No son piscinas de grandes jardines abiertos sino de patios, al resguardo de miradas.

Una entrada muy natural

Si el espacio lo permite hay piscinas que se integran perfectamente en el paisaje. Para esto las biopiscinas son perfectas porque simulan lagos o estanques (además de que su agua no utiliza ningún producto químico para su mantenimiento); pero puedes diseñar una piscina que se adapte al entorno. A esta de Root Design Company se accede por una bonita escalera de piedra.

Con tumbonas integradas en la piscina

¿Me doy un baño o tomo el sol? ¿Y si pudieras escoger ambas opciones? Las piscinas con tumbonas incorporadas te permiten disfrutar del sol pero con algo más de fresquito. Es una manera de relajar en el agua con comodidad. Las gran grandes, que dejan espacio para el baño, y otras que optan solo por colocar tumbonas fijas a la base de la piscina.

Una piscina como si fuera la playa

Para que no eches de menos nada la playa. Son piscinas de arena, realizadas en hormigón gunitado (hormigón proyectado a alta presión) con un revestimiento continuo realizado con arena totalmente adherida al soporte de hormigón. Son de fácil mantenimiento y limpieza. Y no queman aunque estén a pleno sol.

Muy ibicenca

Agua azul y casas blancas, es el reflejo más idílico de Ibiza y puede que te sientas identificado con este tipo de piscinas en las que el blanco es el protagonista alrededor de ellas. No pueden faltar farolillos ni pufs o cojines en el suelo.