Ideas para decorar la casa en pareja

Elegir los muebles, los textiles, los colores… decorar un hogar en pareja es todo un reto que, sin duda, merece la pena.

Por Cristina Soria

Estrenar casa en pareja es un momento muy especial en nuestra vida, y decorarla es el primer paso para empezar a disfrutar de ella. Compartir las decisiones que habrá que tomar es algo muy importante, porque son muchas y requieren de todo el entendimiento y la flexibilidad posible por parte de ambos. Si estás a punto de decorar tu apartamento en pareja, esto te interesa.

Decisiones importantes para el salón

El salón es, sin duda, el centro neurálgico de una casa. Será la estancia donde paséis más tiempo juntos y donde podréis compartir ocio y relax. Por eso, la gran elección para el salón es el sofá. Y es que la vida en pareja está llena de siestas de fin de semana y de noches de peli, manta y sofá. Aunque no lo hagas con otros muebles de la casa, aquí es importante invertir un poco más de dinero que os garantice la comodidad necesaria. Un sofá con chaise longue es una elección que os permitirá tanto estar acurrucados como disfrutar de un poco de espacio propio.

Una vez decidido el sofá podéis pensar en otros rincones que tal vez sean de un disfrute más individual, como un rincón de lectura con un sillón y una estantería para tener a mano los libros, o una zona para poner música, quizás en un reproductor de vinilos.

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La cocina, un lugar para compartir

Aunque vuestra cocina sea pequeña, sin duda pasaréis mucho tiempo en ella, desde el primer café de la mañana. Es importante que ambos os sintáis cómodos en el espacio donde se cocina y se comparten las comidas a diario y que os pongáis de acuerdo a la hora de decorarla. Podéis incorporar una barra para comer los dos a solas, con un par de taburetes altos, que os permita moveros con libertad en la cocina. 

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Si tenéis una animada vida social y os gusta recibir a amigos en casa debéis contar con una mesa de comedor. Valorad cómo de grande debería ser según la afluencia de amigos. Y si no tenéis mucho espacio, una mesa extensible y unas sillas plegables cumplirán de maravilla la misma función.

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Un baño para dos

En un cuarto de baño compartido es importante, ante todo, que impere el orden y se mantengan ciertos espacios propios. Elegid una encimera amplia, si el espacio os lo permite, y podréis tener a mano vuestras cosas sin molestar al otro. Y en esa misma encimera, solo si se puede, colocad dos lavabos independientes, que os den libertad de movimiento a la hora del aseo diario. Si optáis por un solo lavamanos, pero de gran tamaño, colocad dos grifos, y también disfrutaréis de independencia. El espejo que sea lo más grande posible, y la parte inferior del lavabo reservadla para el almacenaje.

En cuanto a la decisión acerca de tener ducha o bañera tendréis que poneros de acuerdo. Si optáis por ducha y tenéis espacio, valorad la opción de integrar una ducha doble.

El dormitorio, un lugar lleno de detalles

Este es uno de los espacios más difíciles a la hora de decorar juntos. Ambos debéis sentir que es un espacio confortable, un refugio, y deberéis poneros de acuerdo en tejidos, colores, iluminación, distribución…

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Lo más importante es que encontréis un colchón que se adapte a vuestras necesidades. El mercado ofrece tantas opciones y materiales, que buscando y probando daréis con el vuestro. Cuando lo tengáis, colocad la cama en la pared principal para que ambos os mováis con libertad.

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No es necesario que contéis con mesitas de noche simétricas. Que cada uno organice su espacio personal junto a la cama. Y haced lo mismo con la iluminación. Es importante que seáis flexibles para que cada uno pueda disfrutar del tipo de luz que más le interese, ya sean apliques o lámparas orientables.

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