El risotto es una de las formas más tradicionales de cocinar el arroz en Italia. La clave es dejar una textura al dente pero a la vez cremosa y es una receta que se puede hacer con multitud de ingredientes tanto vegetales, como cárnicos o del mar. En esta receta, os queremos animar a que preparéis un risotto con gambas y mejillones.
- 350 g de Arroz arborio
- 300 g de Mejillones frescos
- 200 g de Gambas
- 1 ud de Cebolletas
- 1 cuña de Queso parmesano
- 1 chorrito de Vino blanco
- 1 cs de Mantequilla
- Aceite de oliva virgen
- Sal
- Pimienta blanca
- Rúcula para decorar
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1.
Pela las gambas y pon a cocer las cáscaras, las cabezas y los mejillones.
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2.
Deja cociendo 4 minutos desde que rompa a hervir.
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3.
Cuela el caldo, reserva, y saca los mejillones de las cáscaras con cuidado de no quemarte.
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4.
Pela, pica y rehoga en una cazuela la cebolleta con un poco de aceite.
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5.
Agrega el arroz y la mantequilla y rehoga ligeramente.
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6.
Incorpora el vino blanco, deja que evapore el alcohol y añade una taza del caldo hecho con los mejillones y las gambas.
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7.
Removemos para que se consuma y vamos añadiendo caldo y removiendo para que se cocine el arroz.
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8.
Cuando el arroz haya absorbido todo el caldo, retiramos del fuego y añadimos 1 cucharada más de mantequilla rallamos el queso parmesano, removiendo para que se mezclen bien y se fundan con el arroz.
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9.
El objetivo es que nos quede un arroz cremoso y sin caldo.
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10.
Añade las gambas y los mejillones unos minutos antes de acabar la cocción.
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11.
Sírvelo con unas hojitas de rúcula.
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