Thor: Love and Thunder es la gran apuesta de Marvel para este verano de la que todos están hablando por la increíble transformación física a la que se han sometido sus protagonistas, empeñados en cumplir cabalmente con sus papeles ante las altas expectativas de los fans. La cuarta entrega de la saga, que tiene de protagonista al carismático e intrépido Dios del Trueno interpretado por Chris Hemsworth, cuenta con un elenco de estrellas de Hollywood, siendo Natalie Portman la principal revelación de la película. La actriz regresa a los estudios luego de una agridulce ausencia para encarnar a una nueva versión de Jane Foster que porta el traje de Mighty Thor y es capaz de sostener el Mjolnir, el mítico martillo del hijo de Odín, pero conseguir la musculatura del personaje le ha obligado a seguir una rigurosa rutina de ejercicio que implicó desde clases de boxeo hasta levantamiento de pesas.

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Cinco meses antes de filmar, la actriz comenzó con un complejo entrenamiento enfocado en definir la zona abdominal y desarrollar los bíceps, llegar a ello requirió primero que acondicionara su cuerpo por cuatro meses, de esta forma aseguró aumentar el volumen de sus músculos sin sufrir alguna lesión grave o un daño irreparable en sus articulaciones, señaló a Variety la entrenadora Naomi Pendergast, quien fue la guía de Natalie del principio al fin de su preparación.

En total entrenó 10 meses, incluido el periodo de grabaciones de la cinta, pues sólo así podía mantener su musculatura. “Trabajamos en la construcción de la parte superior de su cuerpo tres veces por semana, lo que comprendía ejercicios de brazos, espalda, pecho, boxeo, saltos y carreras”, explicó Pendergast. Los dos días restantes la ganadora del Oscar se dedicó a prevenir lesiones con ejercicios basados en pilates, estiramientos, trabajo de relajación y prácticas de equilibrio.

Si bien, no sufrió ninguna fractura o esguince, sí experimentó fuertes dolores físicos de los que se recuperó de manera favorable: “Se las arregló para superar todo muy bien sin sufrir lesiones graves. Hubo algunos días después de largas sesiones de acrobacias en las que sintió un poco de dolor en las muñecas y el cuello, pero pudo superarlo con un poco de trabajo de relajación”.

La entrenadora explicó que las sesiones eran diarias y duraban entre una hora y media y dos, además mencionó que el personaje de Natalie Portman es cien por ciento físico, por lo que requería fortalecer bastante su cuerpo, específicamente la parte superior. La misma intérprete comentó en una entrevista para el portal Total film que “fue definitivamente muy útil estar fuerte” en especial cuando le tocaba cargar con el peso de la capa todo el día.

No cabe duda que la nacida en Jerusalén ha dado lo mejor de sí para dar vida a Mighty Thor, incluso madrugó una vez que inició la filmación: “La agenda de Natalie estaba muy ocupada, por lo que entrenamos temprano, alrededor de las 4:30 a.m., antes de que comenzara el día”. La pandemia fue un obstáculo para su proceso de transformación física debido a que las primeras semanas debió ejercitarse en casa, medida que se prolongó hasta que los contagios de covid-19 disminuyeron y los gimnasios reabrieron, lo que significó tener acceso a una mayor cantidad de aparatos para las sesiones.

La alimentación también ha sido clave en su impresionante metamorfosis. Natalie siempre ha llevado una dieta saludable, recordemos que es vegana; sin embargo, ha tenido que agregar a su rutina dos dosis diarias de proteína en polvo con el objetivo de aumentar el volumen de sus músculos.

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Aunque el cambio representó casi un año de rigor y trabajo sin descanso, la actriz disfrutó mucho del reto que significó interpretar por primera vez a una superheroína del Universo Cinematográfico de Marvel (MCU). “Por supuesto, nunca he tenido como objetivo ser voluminosa. Fue muy físico, por lo que fue mucho trabajo tanto de agilidad como de fuerza”, dijo Portman a Variety.

Confesó que los cambios físicos e incrementar su fuerza le han facilitado adentrarse más en Mighty Thor. “Definitivamente te ayuda a meterte en el personaje y cambia la forma en que te mueves. Caminas diferente, te sientes diferente. Quiero decir, es salvaje sentirme fuerte por primera vez en mi vida”, añadió la intérprete, de 41 años, que a lo largo de su carrera ha tenido que pasar por varias transformaciones para varias de sus reconocidas cintas, entre ellas The Black Swan.

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La estrella aceptó unirse a la fase cuatro del UMC, del que se alejó debido a la decepción que se llevó durante la filmación de Thor: Un mundo oscuro, cinta en la que participó para trabajar con la directora Patty Jenkins, quien finalmente tuvo que despedirse del proyecto por diferencias creativas con los estudios, decisión que generó el descontento de Portman.

No obstante, Taika Waititi convenció a la actriz de volver a la franquicia con una historia “más audaz y más brillante”. “No quieres que Natalie regrese e interprete al mismo personaje que camina con equipo científico. Ya sabes, mientras Thor está volando, ella se queda en la Tierra, diciendo: ‘¿Cuándo volverá?’. Eso es aburrido. Quieres que ella sea parte de la aventura”, dijo el director.