Después de protagonizar uno de los divorcios más mediáticos de la farándula, Geraldine Bazán ha dejado atrás ese capítulo de su vida del que guarda una gran lección. Durante el tour de medios que la actriz realiza Santo Domingo, con motivo del estreno de la cinta Los Leones, protagonizó una entrevista con la presentadora Ingrid Gómez, para el programa Mujeres al borde. Como nunca, durante esta charla, Geraldine abrió su corazón y reconoció estar en uno de los mejores momentos de su vida, luego de salir fortalecida de la comentada separación del papá de sus hijas, Gabriel Soto.
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Aunque prefiere dejar este tema en el pasado, Geraldine reveló por qué decidió hacer públicos los detalles que llevaron al matrimonio a decidir poner punto final a su historia juntos: “Si, de alguna manera, yo puedo inspirar a una mujer a seguir adelante y, no porque yo traiga una bandera de ‘yo soy un ejemplo’, para nada, pero creo que se trata de enfrentar la vida con lo que tienes, con alegría, con entusiasmo, con amor y es ir para adelante, creo que eso es lo más importante”, explicó Bazán.
Geraldine también reconoció que, si bien, terminar su matrimonio fue una etapa complicada, resalta todo el aprendizaje que le dejó: “Uno tiene que entender muchas cosas ponerte como prioridad, para empezar, en la vida, en el mundo y saber que hay tantas razones y que todo en la vida son ciclos (…) Yo creo que me ha hecho más consiente, me ha hecho una persona, no sé si sea la palabra, pero mucho más sabía, en cuanto al aprendizaje”, detalló.
La actriz aseguró que tras el proceso comenzó a sentirse muy bien dentro de su piel y dio inicio una etapa que califica como una de las más plenas en su vida: “Me ha traído, el poder asentarme en la tierra y decir: ‘Yo soy Geraldine, qué valgo, qué soy y qué quiero yo, más allá de lo que quieran alrededor, el público, los medios, mi familia, mis hijas, no, no no, ¿qué quiero yo? (…) A partir está la semillita que te empieza a dar la luz, empiezas a brillar y empiezan a fluir las cosas. Estoy en el mejor momento de mi vida y, el de mañana, será mucho mejor que hoy”, comentó sonriente.
Por último, Geraldine reconoció que está abierta al amor, aunque comentó que por el momento no tiene muchas ganas de apostar por una nueva ilusión: “No tengo ninguna prisa, de verdad, hay chicos que me gustan y que ni siquiera me puedo salir a tomar un café, porque de verdad no tengo tiempo”, finalizó.