Luego de 15 años de guardar silencio en torno a cómo fue su matrimonio y divorcio con Cristian Castro, Gabriela Bo, quien fuera esposa del cantante en 2004, habló por primera ocasión de su relación con el mexicano, quien la sorprendió el día de su primer aniversario de bodas con una demanda de divorcio. Siempre discreta y ahora que, como ella misma lo describe, puede hablar del tema sin que le duela, asistió como invitada al programa argentino Hay que ver, donde reveló varios detalles de su vida junto a Cristian.

Sincera, Gabriela Bo, contó varias anécdotas de su matrimonio y de cómo era su relación con su suegra, Verónica Castro. Sobre la reacción de la actriz mexicana al enterarse de su divorcio, la paraguaya aseguró que es “súper ubicada” y, cuando los problemas comenzaron, le recomendó terminar la relación: “Me decía que me fuera, '¡huye, sálvate!'. Siempre fue linda, me decía ‘eres buena persona, vas a hacer tu vida, él no va a cambiar. Me hablaba como mujer, yo creo que ella siempre me respetó porque yo me porté súper bien, sabía que yo estaba enamorada”, explicó.

Gabriel reconoció que cuando conoció a Cristian sabía de él por Verónica Castro, pero ella no era fan de su música, cosa que cambió pues, hasta la fecha, canta sus temas y admite que Es mejor así es su preferido: “Mi hermana era fan, pero a mí no me gustaba, yo era fan de su mamá, en realidad, por Rosa Salvaje y todo”. Al parecer, Gabriela se quedó con muy buenos recuerdos de su exsuegra: “Cuando tuvo que hablar conmigo, de mujer a mujer, se portó espectacular conmigo, no puedo decir otra cosa”.

Aunque llevó una muy buena relación, reconoció que convivió muy poco con la estrella mexicana: “Yo no conviví tanto, como me hubiera gustado. La vi, no tanto como la gente se imagina, la habré visto, no sé, ponle 15 veces”. Contó que conoció a Verónica el día en que Cristián fue a pedir su mano: “¡El primer encuentro fue una locura! Fue en Aeropuerto de Asunción, cuando vino a pedir mi mano con su hijo (…) Fue a pedir mi mano, con su hijo y su otro hijo, Michelle, que es un divino”, explicó.

Bo aseguró que gran parte de los conflictos con el cantante fueron porque él se ausentaba por días, situación que comentaba con la familia de él, sobre todo a su abuelita, con quien hablaba regularmente: “Yo no llamaba tanto a su mamá, yo hablaba con la abuela, no hablaba con la madre, tenía más confianza con ella”.

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Gabriela reconoció que durante todo el año que duró su matrimonio se encontraba muy enamorada, por esta razón, cuando la relación terminó se deprimió hasta llegar a pesar 45 kilos: "No comía, me la pasaba llorando".Reveló que ella se separó de Cristián en diciembre de 2003, pero tuvo encuentros con él hasta abril de 2004 cuando, en plena reconciliación, recibió la demanda de divorcio, un día que Cristian se encontraba con ella: “Al principio yo estaba remal, o sea, yo me divorcié y a los 15 días él se casó con otra”.