Hay dos vestidos inolvidables en la vida de Marilyn Monroe, el primero es aquel blanco de la cinta The Seven Year Itch que se levantaba coquetamente y el segundo, un ceñidísimo vestido con el que apareció durante la celebración del cumpleaños de John F. Kennedy. Aquella escandalosa prenda con la que la actriz cantaba el Happy Birthday al hombre con el que se decía tenía un romance, fue subastado. Pero, ¿se puede poner un precio a un pedazo de la historia? Al parecer, sí, cinco millones de dólares (alrededor de 100 millones de pesos mexicanos).
Por supuesto, el precio fue pagado por el trasfondo que hay detrás de este vestido. Creando un efecto de transparencia que hacía parecer que los cristales estaban colocados sobre la piel de la actriz, el diseño estaba especialmente pensado para ser toda un arma de seducción. La pieza tiene bordados a mano 2,500 cristales y estaba tan ajustado a la figura de Marilyn que tuvo que se cosido una vez que estaba puesto.
Con el vestido más sexy del mundo, Marilyn subió al estrado en donde con la voz más coqueta que pudo emitir cantó un Happy Birthday que dejaba pocas dudas sobre su relación con el Presidente John F. Kennedy durante la celebración de su cumpleaños 40 el 19 de mayo de 1962. En ese momento las especulaciones de una relación ilícita entre ellos comenzarían, las cuales siguen tan vigentes en la actualidad como en aquel instante. El inolvidable momento se vivió en el Madison Square Garden durante una cena de gala de caridad.
El icónico vestido fue comprado por el museo de Ripley Believe It Or Not y rompió el récord impuesto por otro vestido de la rubia por excelencia. El vestido blanco de The Seven Year Itch fue vendido en 2011 por 4.6 millones de dólares ($92 millones de pesos mexicanos, solo ocho millones menos de lo que se dio por esta nueva pieza). Se piensa que primero será expuesto en el museo de Hollywood para después viajar alrededor del mundo en las diferentes locaciones que se tienen.
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Aunque durante tres días la casa de subastas Julien’s Auctions estará ofreciendo cientos de objetos que fueron posesión de la actriz, se dice que este vestido fue la joya de la corona convirtiéndose en el más caro del lote.
