En dos almas donde alguna vez existió tanto amor no puede caber el rencor y, a dos años de haber protagonizado una mágica boda con la belleza de Quintana Roo como escenario (se casaron en diciembre de 2012), Ana Serradilla y el productor Héctor Sampiero cierran su ciclo como marido y mujer con “amor”.
A través de su cuenta de Twitter, la misma en la que los últimos años dedicó a enaltecer el trabajo de su esposa, el productor anunció (el pasado 4 de enero) que su relación con la protagonista de “La Viuda Negra” ha terminado. Como todo un caballero, Héctor Sampiero asegura que la separación se dio hace unos meses y que Ana Serradilla fue lo mejor que le ha pasado en la vida.
“Nuestro ciclo se cerró con AMOR hace unos meses, ella fue lo mejor que paso en mi vida… Le deseo lo mejor”, se lee en la cuenta del productor, quien no escribía en Twitter desde octubre. De hecho, el mensaje previo a esta noticia está dedicado a la actriz.
“@La_Serradilla: Nada real puede ser amenazado”, publicó el pasado 19 de octubre.
Siempre discreta con los asuntos referentes a su vida personal, Ana Serradilla ha apostado por el silencio y como de costumbre (muy activa en las redes sociales) ha ocupado sus cuentas de Twitter e Instagram para promocionar su nuevo trabajo en televisión: la serie “La Esquina del Diablo”, que se estrena hoy martes por televisión de paga.
A diferencia de su personaje en la “Viuda Negra”, donde debutó como “chica mala”(interpretó a Griselda Blanco conocida en Estados Unidos como ‘La reina de la coca’ su actividad como narcotraficante en los años 70 y 80), ahora da vida a una polícia.
Además de promover su nuevo proyecto, hace unos días, la protagonista de “Alguien más” compartió algunas imágenes desde la playa, destino que eligió para disfrutar de sus vacaciones de invierno.
Entre las imágenes se aprecia una de su mano izquierda (ya sin su anillo de compromiso ni de matrimonio), luciendo dos nuevos y sencillos anillos: “Amé mi pequeño anillo”, escribió en inglés la actriz de 36 años.
En otra foto Ana Serradilla compartió una imagen de la puesta del sol desde la playa, donde escribió en la arena “Time is always now” (el momento es simpre ahora).
