
De acuerdo con Rodriguez, encontrar a la actriz adecuada para el papel que considera el "más difícil de todos y el más representativo de la saga" no fue cosa fácil, y tras hacer casting con más de 70 jóvenes encontró en Eiza, de 24 años de edad, la cualidad clave del personaje.
"Cuando la vi, tenía el cabello rubio, pero luego se lo pintó castaño para la audición. Leyó unas líneas y vi que tenía esa cualidad que requería Santanico: una energía salvaje", explicó el director estadounidense al periódico Reforma. "El reto que tiene (Eiza) no es fácil, pues debe llenar los zapatos de Salma. Pero nos ha impresionado a todos y cada que la veo en el papel me dan ganas de casarme con esa vampira", agregó entre risas.

Por su parte, Eiza también habló sobre la experiencia de interpretar a la deshinibida vampira latina: "Me tuve que poner en contacto con mi lado sensual de mujer, yo venía haciendo personajes de adolescente, como Lola. Ahora me toca interpretar a un personaje extremadamente sexual, pero poderosa; ella nunca pierde lo 'cool', tiene un temple increíble", mencionó la mexicana, y agregó que otro de los retos fue conseguir el físico adecuado para el papel, para el cual tuvo que subir algunos kilos. "Yo soy muy delgada y Salma (Hayek) era mucho más curvilínea. Lo importante era el cuerpo femenino, que fuera atemporal. Subí lo que pude subir y ahorita ya lo bajé otra vez, porque es mi constitución. Pero ya no estoy tan flaca como antes", afirmó.

De esta manera, Eiza comienza con el pie derecho su carrera artística en Estados Unidos, país en el que ya se siente como pez en el agua. "Me he rodeado de gente muy linda y positiva y eso ha hecho la gran diferencia para que yo esté mucho más tranquila y adaptada", explicó la actriz sobre su vida en Los Ángeles, en donde reside desde hace aproximadamente un año.