Mariah Carey

La llamaban Espejismo. Y es Mariah Carey. En su juventud siempre andaba deprisa, buscando la suerte en forma de productor discográfico. Y se encontraron. Él se llamaba Tommy Mottola. Escuchó en su limusina, tras una fiesta, una demo de Mariah. Y volvió veloz en busca de esa princesa racial con voz de ángel. Ella ya se había ido. Estuvieron tres días buscándose. Cuando se encontraron, fue un renacer para Mariah Carey en el campo profesional y personal. Pero los cuentos de hadas no siempre brillan hasta el final...

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27 Marzo 1970

Long Island, Estados Unidos


Horóscopo : Aries


Familia: su padre, Alfred Carey, era ingeniero aeronáutico con sangre venezolana y afroamericana; su madre, cantante de ópera, había nacido en Irlanda. Tiene Mariah Carey dos hermanos mayores: Morgan y Alison

Su infancia no fue fácil. Tenía tres años cuando sus padres se divorciaron. Los prejuicios raciales favorecieron mucho una ruptura que dejó a la pequeña Mariah marcada. Las heridas se las curó la niña, junto a su hermano Morgan, a base de buena música que iba de Stevie Wonder a Sarah Vaughan, sin olvidar a la gran Aretha Franklin.

De la escucha a la interpretación. Mariah Carey acompañó a su hermano en una banda para, poco después, pasar a formar parte del coro de la cantante pop Brenda K. Starr. Fue ella quien animó a la joven a creer en sus posibilidades vocales y lanzarse a la aventura de conquistar el difícil mercado discográfico de Estados Unidos. El primer paso exigía acercarse a los grandes ejecutivos de poderosas empresas como Sony o CBS y hacerles escuchar una voz con extraordinarios registros.

El amor

Su voz se cruzó en el camino de Tommy Mottola, el poderoso presidente de Columbia Records. Tras una fiesta, este auténtico magnate del mercado discográfico puso en su limusina una cinta con unos acordes, y unas octavas, que le hicieron adivinar que allí había talento y, por tanto, sustanciosos beneficios para su compañía. Pero ¿de quién sería aquella cinta que, gran despiste, le habían entregado sin ningún tipo de aclaración sobre quién era la poseedora de tamaña voz? Las pesquisas duraron varios días, pero al final el príncipe encontró a su princesa. Hicieron buenas migas profesionales e inmediatamente se hablaron de amor.

El 5 de junio de 1993 se casaron, emulando la pomposidad del enlace entre el príncipe Carlos y Lady Di. Todo hubiera sido perfecto, si no fuera por la infelicidad que rondaba en torno a la artista. No reía. Se sentía encerrada. Como declaró poco después de su inevitable divorcio, en 1997: "Solía pensar... '¿Por qué me siento tan desgraciada?' Notaba que no era tan feliz como otras artistas de mi edad y todo porque no estaba viviendo mi propia vida". Muchos fueron los rumores que corrieron sobre el implacable control que Tommy ejercía sobre Mariah. Cuidaba su vestuario, sus canciones, sus actuaciones, sus amistades... Y ella se quebró.

Después de este fracaso sentimental, la cantante se concentró en su trabajo, en la enérgica tonalidad de una voz con miles de matices. El entusiasmo llama al entusiasmo. Mariah se sintió irremediablemente seducida por Luis Miguel y sus boleros. Hubo una correspondencia, bien apuntada por Cupido. Sin embargo, Mariah Carey, Espejismo para los compañeros, no puede sino rozar la felicidad. Se volcó en la promoción de su álbum Rainbow. Tanto que en julio de 2001 fue hospitalizada por encontrarse exhausta.

Mariah Carey se levanta tras cada caída. Y su voz permanece intacta.