Jack Nicholson

Una sonrisa amenazante, un titubeo alérgico, una mano que tiembla... una risa histriónica. Algo ocurre: Jack Nicholson está en escena. Desde que se iniciara en el Séptimo Arte con las joyas de terror de Roger Corman, Jack Nicholson no ha parado.

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27 Abril 1937

Neptune, EEUU


Horóscopo : Tauro

Su infancia fue propia de una de las películas de terror que inmortalizara durante su juventud. Nació en el seno de una familia rota, con un padre violento y alcohólico y una madre que se hacía pasar por su hermana mayor.

En 1958 le llegó la oportunidad en el cine. Debutó con Grita, asesino. Aquello fue el comienzo de un relativo encasillamiento en películas de terror. Y decimos relativo, porque a Jack Nicholson nunca ha habido quien le controle, le domine, le dé forma... Aunque Roger Corman, el director de esas películas serie B basadas muchas en cuentos de Allan Poe, sí que le tuvo algo retenido. Una década más tarde, después de interpretar decenas de jóvenes motoristas y psicópatas de miedo, le llegó la gran oportunidad. Su papel de joven abogado, con claros problemas de alcoholismo, que inicia un viaje en moto con, nada más y nada menos, que Peter Fonda y Dennis Hopper, le valió su primera nominación para el Oscar. Easy Rider se convirtió en un grupo de juventud, un auténtico icono por el que no han pasado los años.

Después de este largometraje, road movie a dos ruedas, Jack Nicholson hubo de bregar con otros papeles complejos, basta recordarle en Alguien voló sobre el nido de cuco, El resplandor o El cartero siempre llama dos veces, filme en el que Jack Nicholson mostraba todo su potencial erótico junto a Jessica Lange.

Los años ochenta trajeron títulos emblemáticos, entre los que destaca El honor de los Prizzi, por su actuación junto a Anjelica Huston, actriz que sería su pareja durante años.

Este actor, al que conocen por sus excesos, en gesto y modo de vida, se ha convertido en uno de los más carismáticos de la historia del celuloide. No ha dudado en convertirse en personaje de cómic (¿quién no le recuerda pintado de joker para la ocasión en Batman?); ni le ha importado hacer de hombre-lobo. Jack Nicholson no tiene límites y para él sirve el título de uno de sus últimos éxitos: Mejor imposible. Un eslogan que pone en evidencia que el bueno de Jack sigue al pie del cañón. Con su sonrisa inquietante...