Paco Rabal

Paco Rabal era un hombre que disfrutó de la vida minuto a minuto; un personaje muy querido en el mundo del cine y de la escena españoles que trabajó de la mano de los mejores directores nacionales y extranjeros, siempre con un excelente sentido del humor y con las mismas ganas de conquistar el mundo que en su juventud. El mundo de la intepretación llora su desaparición.
8 Marzo 1926 - 29 Agosto 2001
Águilas (Murcia), España
Francisco Rabal nació el 8 de marzo de 1926, hijo de minero y molinera, en un pequeño coto minero cercano al pueblo de Águilas (Murcia). Siendo él un niño de seis años su familia abandonó su querida Murcia rumbo a Madrid, ciudad en la que trabajó en varios oficios, desde vendedor ambulante, hasta empleado en una fábrica de chocolate.
Durante la posguerra, trabajó como electricista en los Estudios de cine Chamartín y fue allí donde comenzó a hacer sus pinitos en el mundo de la interpretación. Sus primeros papeles fueron como figurante en algunas de las producciones de los citados estudios, pero siguiendo los consejos del poeta Dámaso Alonso se animó a intentar trabajar en el teatro.
Fue en 1950, cuando desempeñó sus primeros papeles de protagonista.
El empresario teatral José Tamayo le dio su primera gran oportunidad al contratarle para que formara parte de su compañía, en la que conoció a su mujer, la excelente actriz Asunción Balaguer, una excepcional actriz que fue capaz de abandonar su brillante carrera para dedicarle la vida entera a Rabal, con el que tuvo dos hijos, Teresa y Benito.
Paco Rabal llamó la atención del gran cineasta Luis Buñuel en la película Historias de la radio y decidió contratarlo para interpretar el personaje de Nazario en la película Nazarín, rodada en México. Este filme no sólo supuso su gran lanzamiento internacional, sino que le permitió iniciar una profunda amistad con Luis Buñuel, con quien colaboró en múltiples proyectos. A raíz de esta película, comenzó a trabajar con prestigiosos directores extranjeros como Antonioni o Visconti, mientras que en el cine español se decantó por los directores que forman el movimiento denominado "nuevo cine español", integrado por Carlos Saura, Miguel Picazo, Claudio Guerín o Jorge Grau.
A comienzos de los años 80 dio vida a diferentes personajes dirigidos por Mario Camus en La Colmena y Los Santos inocentes, película por la que fue premiado como mejor actor, junto a Alfredo Landa en el Festival de Cine de Cannes.
En 1990 trabajó a las órdenes de Pedro Almodóvar en la película Átame, pero uno de los papeles fundamentales de su vida sería el del pintor Francisco de Goya, a quien encarnó en tres películas diferentes. En 1999 dio vida al artista a las órdenes de Carlos Saura, papel que le valió el 'Goya' a la mejor interpretación masculina del año. Con su actuación en la popular serie televisiva Juncal conquistó definitivamente al gran público. Sus descendientes (sus hijos, Teresa y Benito, y su nieto, Liberto) han seguido sus pasos en el cine; pasos que han conformado una de las carreras más brillantes y carismáticas de la interpretación española.
Falleció de manera inesperada el 29 de agosto de 2001 a los 75 años de edad debido a un enfisema pulmonar cuando viajaba en un avión procedente de Canadá con dirección a España. Paco Rabal, sin embargo, no volvería a pisar su tierra. Su avión tuvo que aterrizar de forma extraordinaria en Burdeos, después de que el actor sufriera un fuerte ataque de tos. Francisco Rabal había acudido a la ciudad canadiense de Montreal para asistir al 25 aniversario de la edición del Festival Films Du Monde, y aunque había pensado en retirarse su profesión era lo que él mantenía con vida. Fue incinerado y enterrado en el pueblo que le vio nace, la localidad murciana de Águilas, bajo un almendro al que acudieron fieles admiradores, amigos y vecinos a velar su cuerpo.