El arte de la limpieza facial y cómo dominarlo

Repite después de nosotros: ‘la limpieza facial es básica en una rutina de belleza’. No importa que te hayas desmaquillado ya, lavar tu cara es esencial al momento de tener una piel sana y libre de impurezas. Es por esto que miles de marcas han desarrollado sus propios productos para ese momento. Y es que cada limpiador se adecua a un distinto tipo de piel, pues si usas uno que sea muy agresivo podrías acabar con problemas que no tenías antes, como pequeños brotes de acné. Existen desde cepillos, cremas limpiadoras, geles, aguas micelares, limpiadores en aceite, todo un universo de productos diseñados especialmente para que tu piel esté limpia y saludable. Pero en este sinfín de opciones, ¿cómo elegir la que es adecuada para ti? Hemos hecho una selección de productos para que conozcas más de ellos y así puedas decidir junto a tu dermatólogo cuál es la rutina de limpieza que debes de seguir y si te conviene realizarla tanto en la mañana como en la tarde.

El primer paso es encontrar un limpiador que vaya de acuerdo con tu tipo de piel. Si eres fanático de Tiktok seguramente estás más que enterado de que el CeraVe Hydratating Facial Cleanser es el favorito de la Gen Z. ¿Por qué? Se trata de un producto accesible y efectivo. Promete que su fórmula limpia, hidrata y ayuda a restaurar la capa protectora de la piel. La marca explica que esta combinación está formulada con ácido hialurónico -tan socorrido en estos tiempos- para ayudar a mantener la piel hidratada. Por supuesto, cumple con la necesidad básica de remover las impurezas y restos de maquillaje, eso sí, sin dejar la piel seca. Además, cumple con los básicos que debes revisar en tus productos de belleza, como la ausencia de fragancia e irritantes. Éste está recomendado para la piel de normal a seca.

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¿Qué pasa si tienes la piel grasa? También existen limpiadores que se adecuan a este tipo de piel. Este de La Roche-Posay promete una limpieza a profundidad, eliminando las impurezas y a la vez, combatiendo con el exceso de grasa. Para usarlo, solo hay que humedecer el rostro con agua tibia y aplicar una pequeña cantidad del gel, con el que darás un masaje suave mientras se hace espuma. Éste se recomienda usarlo de día y de noche. No tiene aceites, ni alcohol, ni parabenos, ni siquiera jabón.

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Si lo que buscas es una textura diferente cuando de limpiadores se trata, el de First Aid Beauty viene en una presentación en crema. Promete limpiar la piel, dejándola con una textura suave. Cuenta con una fórmula de pH balanceado que mantiene las características naturales de la piel, evitando que se reseque o que salgan brotes. Además, tiene alantoína -un compuesto químico muy buscado en la dermatología-, para calmar la piel.

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Una vez elegido tu limpiador -y te recomendamos que busques bien el que mejor vaya para ti porque puede ser un deal breaker-, es momento de revisar si necesitas una herramienta para el momento de tu limpieza. Aunque la mayoría funcionan al frotarlos contra la piel húmeda, otros requieren o se pueden ayudar de herramientas de limpieza. El más popular, es sin duda el Luna de Foreo. Se trata de un cepillo eléctrico con un diseño ergonómico que promete remover hasta el 99.5% de impurezas. Funciona a través de pulsaciones, con 8 intensidades ajustables para distintos tipos de piel. Para evitar los daños provocados por los cepillos tradicionales, éste cuenta con cerdas de silicón y promete durar hasta 300 veces sin necesidad de recargarlo.

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Que si lo que buscas es un cepillo limpiador más tradicional, el de Michael Todd es uno de los más chic cuando de diseño se trata. Produce 300 movimientos por segundo para hacer una limpieza más profunda de la que pueden alcanzar los dedos. Cuenta con 6 velocidades distintas y un temporizador que te alerta para hacer la limpieza el tiempo necesario en cada área.

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