5. Bloqueador
El bloqueador es uno de los productos esenciales para retrasar al máximo el envejecimiento. ¿El peor error? No usarlo en otoño o invierno (por pensar que no hace el suficiente sol para dañar nuestra piel), u omitirlo si haces home office, pues los rayos de la computadora, celular o cualquier otro dispositivo podrían perjudicar tu dermis, sin que te des cuenta.
Por eso, elige un bloqueador de acuerdo a tu tipo de piel, libre de aceite y no comedogénico, una regla que debes memorizar para toda la vida, sobre todo si tienes tendencia al acné. "La luz azul causa un tipo diferente de daño. Causa la generación de especies de oxígeno reactivo que dañan el colágeno, provocan arrugas, cambios en la pigmentación y flacidez", expresó el dermatólogo Michele Farber a The Huffington Post.
¿Lo cierto? Es que, a pesar de que estos son los elementos esenciales para una rutina perfecta, no hay nada como consultar a un profesional para que diseñe la adecuada a tu tipo de piel y necesidades.